El Grupo de Río estudia la admisión de nuevos países
La cuarta reunión de máximos mandatarios del Grupo de Río se propone discutir su futuro en cuanto al papel que representará en América Latina y la inclusión de nuevos países miembros dentro de su organización. Entre hoy y mañana se realizará la cuarta reunión de presidentes: Carlos Andrés Pérez (Venezuela), Carlos Salinas de Gortari (México), Carlos Menem (Argentina), César Gaviria (Colombia), Fernando Collor de Mello (Brasil), Alberto Fujimori (Perú) y Luis Lacalle (Uruguay).
También asistirán los presidentes Patricio Aylwin (Chile) y Rodrigo Borja (Ecuador), dos nuevos países que se estrenan en el Grupo de Río, ampliándolo a nueve socios. En la cumbre de Caracas se analizará, asimismo, el ingreso de Bolivia y Paraguay, que han solicitado entrar en el grupo, a pesar de la resistencia de México, por lo que podría aumentar a 11 los países miembros.La organización empezó en los años ochenta con el nombre de Grupo de Contadora, integrado por Venezuela, México, Colombia y Panamá, como una iniciativa de paz para mediar en la democratización de Centroamérica. Posteriormente, se amplió a ocho miembros en Río de Janeiro, pero en 1988, con la conducta del general Manuel Noriega, Panamá fue suspendido temporalmente del grupo y ahora, en Caracas, será definitivamente excluido.
Una vez concluida la misión en Centroamérica, el Grupo de Río intensificó sus acciones hacia el fortalecimiento del proceso de integración regional como una alternativa propia frente a la inercia o falta de protagonismo de la Organización de Estados Americanos (OEA).
La situación actual no ha cambiado, y hasta los observadores diplomáticos en Caracas piensan si el Grupo de Río, ahora que está creciendo en número, podría tomar eventualmente la iniciativa y convertirse en una OEA suramericana.
La región ya posee, desde hace 10 años, dos organizaciones dedicadas a la integración económica: el Sistema Económico Latinoamericano y la Aladi, con sede en Uruguay.
