Un atentado deja sin electricidad a varias zonas de Guipúzcoa

La explosión de dos artefactos dejó ayer sin suministro eléctrico a algunas localidades guipuzcoanas durante varias horas. Las bombas, que habían sido colocadas en las patas de sujeción de una torre de gran tonelaje de Iberduero, ubicada en la falda del monte Jaizkibel, provocaron que ésta cayera sobre una línea de fluido que distribuye electricidad a domicilios y fábricas. La torre contra la que se realizó el atentado se encuentra situada a menos de medio kilómetro de la central térmica de Pasajes. Un portavoz de Iberduero negó, a pesar de todos los indicios, que el atentado terrorista fuese dirigido contra ellos. Tras la explosión, que se produjo pasadas las doce de la noche, amplias zonas de Rentería, Pasajes, Lezo y algunos barrios de San Sebastián se quedaron sin luz. 16.000 abonados de domicilios de las localidades señaladas permanecieron sin suministro hasta cerca de las dos de la mañana. En torno a la 1.45, Iberduero pudo restablecer la luz a las casas particulares, no así a las fábricas de la zona.

A mediodía de ayer, ocho de las 14 empresas afectadas seguían sin luz debido a que los operarios no habían podido restablecer la línea que les permite obtener fluido. Responsables de Iberduero indicaron que la torre destruida quedará reparada en cuatro días. A partir del lunes se iniciará un balance de los daños que ha provocado la destrucción de la torre y de la línea de fluido.

Dos horas después de esta acción terrorista, se iniciaba en Astigarraga (Guipúzcoa) un incendio provocado en un Renault 21, sin matricular. Las llamas se propagaron a tres vehículos más que se encontraban en las inmediaciones del concesionario Renault. El incendio destruyó totalmente dos de los automóviles y provocó daños de importancia en otros.

Coche incendiado

Por otra parte, el automóvil de una agente de la policía autonómica vasca fue incendiado en la noche del jueves por varios desconocidos en Usúrbil (Guipúzcoa). El coche, que se encontraba estacionado en las proximidades de su domicilio, tuvo que ser desviado del lugar por su esposo para impedir que el fuego se propagase a casas próximas.Los hechos se produjeron después del enfrentamiento que tuvo lugar en esta localidad entre agentes de la Ertzaintza y manifestantes, a raíz de que éstos cortasen la carretera nacional y provocasen altercados en el pueblo. La propietaria del vehículo, que no se encontraba de servicio, está convencida de que la destrucción del automóvil está motivada por ser policía.