Asilados africanos acusan a la policía de atacarles con gases irritantesJ

Viene de la página 1Numerosos refugiados africanos han relatado a EL PAIS que agentes de la Policía Municipal de Madrid les han atacado arrojándoles en la cara gases lacrimógenos, mientras se hallaban durmiendo a la intemperie en los jardines de la plaza de España. También han asegurado que en otras ocasiones han sido agredidos por empleados del Ayuntamiento con chorros de agua a presión a fin de convencerles para que no pernocten en los parques.

Varios de los denunciantes han comentado los hechos a agentes del Cuerpo Nacional de Policía de la comisaría del distrito de Universidad, pero no se han atrevido a formalizar la correspondiente denuncia por miedo a ser víctimas de represalias.

Sin embargo, los nigerianos Joseph Yyen Osagiobare y Kingsley Edomeonyi, entre otros, sedecidieron a relatar los hechos en la comisaría del distrito de La Latina. Ambos fueron atacados entre el 28 y el 29 de agosto pasado por agentes municipales, que presuntamente les arrebataron sus objetos personales, además de echarles gases lacrimógenos. Uno de ellos asegura que estuvo retenido una hora dentro de un coche patrulla, donde los policías le echaron un aerosol irritante.

El Defensor del Pueblo, Álvaro Gil Robles, tuvo conocimiento de estos hechos y otros ocurridos en el mes de julio, por lo que solicitó aclaraciones al Ayuntamiento de Madrid. El concejal de Seguridad y Policía Municipal, Fernando Bocanegra, ordenó que el departamento de Asuntos Internos tomase declaración a todos los africanos implicados y al oficial y a los 10 policías que intervinieron en las operaciones del 28 y 29 de agosto pasado.

Asuntos Internos

Las investigaciones, dirigidas por el oficial José Luis Gallego García, se han concretado en un informe de 101 folios, finalizado ayer. El estudio consta de una única conclusión: "No existen razones o motivos para la exigencia de responsabilidad disciplinaria a los policías municipales que realizaron levantamiento de los asentamientos del Parque de la Montaña los días 28 y 29 de agosto de 1990, cuyas intervenciones no constituyen hechos aislados, sino acciones policiales incardinadas dentro del global problema que plantean los 'acampados' en zonas ajardinadas en el centro de la ciudad, con progresivo deterioro de los espacios verdes y su entorno ambiental".

El libanés Ali Suleiman Nasser, de 33 años, aseguró a EL PAIS que hace tres semanas fue atacado por policías municipales cuando dormía en la plaza de España. "Estuve dos días muy mal, con vómitos y sin poder comer. Fui a un médico de la Cruz Roja y me recetó unas pastillas de Mosegón", explicó. Ali Suleiman añadió que otras veces los agentes les quitan el papel que les acredita como refugiados.

Bocanegra ordenó una investigación sobre estos asuntos, ya que, además, algunos africanos sostienen que los agentes les han quitado objetos y joyas. Uno de los declarantes afirma que le han desaparecido efectos valorados en 20 millones de pesetas. Bocanegra considera que tales acusaciones son "disparatadas".

El edil ha declarado que sólo se "han decomisado útiles de aseo y vestimenta que, a juicio de los policías, reciben la consideración de género abandonado en la vía pública, dado su mal estado de conservación y suciedad".

El máximo responsable de la Policía Municipal reconoce que ésta tiene aerosoles con gases irritantes como arma de defensa para los agentes en caso de ser atacados, "pero no hay constancia de que los hayan utilizado contra los africanos". Bocanegra, en cambio, admite que "el servicio de limpiezas ha usado mangueras de agua para limpiar la suciedad que ocasionan las acampadas de estas personas en la plaza de España".