Un arado, hace 27 años

Hay que retroceder 27 años para localizar los primeros enfrentamientos entre los Izquierdo y Cabanillas, familias asentadas en Puerto Hurraco. Ambas familias, dedicadas a las labores agrarias, habían convivido hasta entonces sin aparentes problemas.Según la historia reconstruida con los testimonios de esta vecina aldea y de la cercana población de Monterrubio de la Serena, fue un viejo utensilio agrario, un arado, el que originó el conflicto. Amadeo Cabanillas irrumpió con el arado en una finca cuyas lindes se las disputaban ambas familias. Pocos días después, Amadeo Cabanillas fallecía a manos de Jerónimo, el hermano mayor de los Izquierdo, que ingresó en prisión.

Otros dos miembros de la familia Izquierdo, Emilio y Antonio, en compañía de dos de sus tres hermanas, trasladaron su residencia a Monterrubio de la Serena. "Los dos hombres hablaban poco pero hacían una vida normal; no así las mujeres, encerradas en casa y sin ninguna relación con la población", declaró a este periódico una vecina. "Pero el estado de las mujeres empeoró tras los últimos acontecimientos", añadió.

Esos nuevos hechos, que originaron otra vez el enfrentamiento entre las dos familias hay que situarlos en ambas poblaciones. Hace aproximadamente cinco anos, se produjo un incendio en el domicilio de Isabel, la madre de los Izquierdo, en Puerto Hurraco, en el que falleció la mujer. Los reproches y las mutuas acusaciones volvieron a hacer otra vez acto de presencia.

Jerónimo Izquierdo había abandonado la prisión y, tras permanecer desterrado, regresó a la zona. Poco tiempo después se producía un nuevo incidente. En el invierno de 1986, un miembro de los Cabanillas adquiría alimentos en la cooperativa de Monterrubio de la Serena. "Sin mediar palabra, Jerónimo se dirigió hacia él y trató de asestarle una puñalada", según relató un vecino.

El mayor de los Izquierdo ingresó nuevamente en prisión, donde falleció poco después. Esto crispó aún más los ánimos de su familia.