Los errores del comité
organizador del Mundial de Italia 90 han provocado inmensas pérdidas a los empresarios hosteleros de Roma, según denunciaron Sergio Villarini, presidente de la asociación italiana de hostelería, y Giorgio Bodoni, representante de 1.800 restauradores de la capital romana. Los hoteles han registrado a lo largo del mes de julio una ocupación inferior en un 60% a la del año pasado en las mismas fechas. Los restaurantes han visto reducida la afluencia de clientes en las fechas previas a un 85% menos que el verano pasado, lo que ha ocasionado unas pérdidas de alrededor de 40 millones de dólares (unos 4.200 millones de pesetas). "El gran fallo de la organización ha sido decir que no había un sólo hotel libre en Roma, lo que ha alterado los planes de miles de turistas potenciales", lamentó Villarini.
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