¡Estoy harta de ser pobre!

Desde hace varios años soy abonada de la Orquesta y Coros de RTVE; pues bien, cuando por el cierre del teatro Real ésta pasó a ofrecer sus conciertos en el teatro Monumental de Madrid las localidades sufrieron una subida lineal que afectaba a los del gallinero en un 67%, mientras que, a los pobres del patio de butacas sólo les suponía un 20%. Se acondicionó dicho teatro, pero únicamente la entrada, enmoquetada de lujo, el escenario lógicamente y el patio de butacas. El gallinero se haría con posterioridad.Llega el segundo año y como parece ser que al ser pobre va unido el ser tonto, se pasa por alto el arreglo, mientras tanto seguimos oyendo arriba las sirenas de ambulancias y policía, el pito del guardia de tráfico y las conversaciones detrás de las puertas de los acomodadores.

Con ello entramos, como en las sevillanas, en el tercer año. Nueva subida, esta vez de un 20%. Cuando recojo mi abono trato de informarme si este año y con la nueva subida se producirá el acondicionamiento para los sufridos de arriba; la respuesta es negativa y, por otra parte, no hay razón para quejarse del precio de las entradas sólo con que se compare con el de otros espectáculos. De vergüenza ¿no?

Lo prometo ante todos los lectores; si algún día soy rica, como además dejaré de ser tonta, iré a todos los patios de butacas de todos los teatros del mundo, con lo que podré conocer de cerca a músicos, cantantes, actores..., sentarme en cómodas butacas y oír perfectamente el espectáculo por mí elegido.-