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ITALIA 90

Villar ratifica al técnico en su cargo

Ángel María Villar, el presidente de la federación española, ratificó ayer públicamente en su cargo al seleccionador, Luis Suarez, unas horas antes del regreso a España. Villar aseguró: "Me siento decepcionado porque tenemos equipo para llegar más lejos". Suárez manifestó: "Vuelvo con la cabeza bien alta".Villar fue tajante en relación con Suárez: "Tenemos confianza en él. De lo contrario, no le habríamos renovado el contrato antes del Mundial. No me arrepiento de esa decisión. Llevamos una línea coherente de trabajo, ya que no es normal prolongar por tanto tiempo una relación contractual en el fútbol". Estas palabras no implican, sin embargo, que Villar se sienta satisfecho. Mientras charlaba con unos amigos, pegó dos puñetazos a una puerta y dijo: "Si nos pegan palos, será con razón porque hemos perdido una gran oportunidad". Después, en una conferencia de Prensa improvisada, se mostró más comedido.

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El dirigente aseguró estar aún bajo los efectos de la derrota: "No me la acabo de creer. Los jugadores no salieron pensando en Argentina. Lucharon hasta el último segundo. No puedo reprocharles nada. El máximo responsable soy yo: de lo bueno y, de lo malo". Se negó a hacer valoraciones sobre el rendimiento de algunos: "Tengo mis opiniones. Pero, por mi cargo, no puedo hablar de cuestiones técnicas". Intentó restar importancia a los incidentes ocurridos en la concentracion: "Nadie ha perdido los papeles. Han sucedido nimiedades y el propio interesado [Suárez] reconoció que se había equivocado". Finalmente, respondió con ironía a una supuesta queja de Suárez en el sentido de que se había sentido solo: "Yo también me siento solo cuando he de tomar decisiones importantes ".

Y solo, completamente solo se presentó Suárez ante los periodistas. Estaba relajado, pero con unas profundas ojeras. "He dormido poco. Había acumulado mucha tensión. Soy una persona muy nerviosa. Me han hecho así y quizá a veces exagere, pero no puedo cambiar", se excusó. Quiso mostrarse como un hombre que tiene la concienela tranquila: "Nadie nos puede recriminar nada. A los jugadores, desde luego, no. A mí... No lo sé". "He intentado hacer mi trabajo lo mejor posible", comentó.

Suárez espera mantener una conversación con los federativos para aclarar cualquier diferencia: "Yo he podido cometer errores, pero también otras personas. Cada palo debe aguantar su vela".

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