Fujimori anuncia la vuelta de Perú al FMI tras un alejamiento de cinco años
En un gesto inédito en el último quinquenio en Perú y distanciándose de la política de abierto enfrentamiento y rechazo de las fórmulas del Fondo Monetario Internacional (FMI) por parte del presidente saliente, Alan García, el mandatario electo de Perú, Alberto Fujimori, ha reconocido, ante la prensa internacional destacada en Lima, que ese organismo busca financiar "el desarrollo y el crecimiento de los países".Anticipándose a la reunión que tendrá el próximo 28 de junio en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York con los directivos del FMI, Banco Mundial y Banco Interamericano de Desarrollo, Fujimori afirmó que el objetivo principal de su mandato es el problema de la deuda externa, privilegiando así estos contactos desde el comienzo con una corta gira que lo llevará a EE UU, Japón y Corca del Sur antes de asumir la presidencia peruana el 28 de julio próximo.
Según el presidente electo, el propósito de estos contactos con los más importantes financieros mundiales, propiciados por el también peruano y secretario general de las Naciones Unidas, Javier Pérez de Cuéllar, es el de enviar un mensaje a la comunidad financiera internacional sobre la posición del nuevo Gobierno peruano, para "integrarnos al FMI con todos los derechos y atribuciones, cumpliendo con sus compromisos; pero, no sólo con el Fondo Monetario, sino con los países cooperantes y con los demás organismos internacionales de crédito".
Esta afirmación de fe con el sistema financiero internacional viene a contradecir la política seguida en los últimos cinco años por Perú y encabezada por el presidente Alan García, quien recién iniciado su Gobierno en julio de 1985 declaró que el pago de la deuda exterior peruana se haría únicamente con el 10% de las exportaciones nacionales y luego, con el correr de los meses, rechazar en su totalidad el pago de esta deuda -que hoy alcanza los 20.000 millones de dólares- bajo las fórmulas de cartas de intención.
Ahora, Fujimori subraya que hay un consenso general para normalizar estas relaciones, estableciendo que el marco de las Naciones Unidas para ese contacto inicial es "muy favorable" y observando que los topes financieros de un futuro acuerdo con esos organismos "no tienen ningún condicion am lento" en la política exterior que seguirá respecto a la deuda, ya que el programa que presentará el Perú próximamente muestra la intención de estabilización económica y crecimiento que le da esperanza de encontrar apoyo en el FMI.
