Los refugiados polacos rechazan un alojamiento de la Iglesia

La Cruz Roja de Bilbao se reunirá hoy con las autoridades vizcaínas para encontrar un lugar en el que instalar al centenar de polacos que hace 15 días llegó a Bilbao en demanda de asilo político. Los refugiados rechazaron el ofrecimiento del obispado de esa ciudad para alojarse en instalaciones de la Iglesia y pasaron las noches del viernes y el sábado en la calle. Sin embargo, ayer se dispersaron, dejando en la zona en la que se habían concentrado por la noche, frente a la sede de la Cruz Roja de la capital vizcaína, restos de equipaje, ropa y alimentos. Ni la Cruz Roja ni las autoridades de Vizcaya conocían ayer el paradero exacto de los refugiados ni el motivo de su dispersión.El presidente de la Cruz Roja de Vizcaya, Carlos Fuertes, declaró ayer a Efe: "La consigna de ellos ha sido separarse y juntarse mañana. Algunos han pasado la noche en pensiones, otros en cámpings, varios han acampado por su cuenta y algunos se han desplazado a otras localidades vizcaínas, como Santurce". Los refugiados pernoctaron el viernes en la calle tras negarse a permanecer en un refugio de montaña que el obispado puso a su disposición en el puerto de Urquiola, porque les parecía que estaba, demasiado alejado de Bilbao.