Subidos al carro de los Rolling Stones
Un club de fútbol, un modisto, un banco y una empresa cervecera se suman al espectáculo
Un total de 64 remolques atraviesan Europa con 900 toneladas de material que se convertirán en "el mayor espectáculo del mundo", según los promotores de la gira de los Rolling Stones. El grupo de rock, que lleva 25 años en el tajo, llegará a Madrid cuando 287 carpinteros, ingenieros de luces y demás especialistas hayan dejado a punto para los días 16 y 17 el escenario donde venderán su magia.
Los austeros vestuarios del Atlético de Madrid se están convirtiendo en lujosos camerinos para cinco rockeros. Donde antes estaban las duchas y casilleros se colocará un billar y pantallas de videojuegos para que los Stones se relajen minutos antes de enfrentarse, cada día, a 60.000 seguidores. Disfrutarán de la planta completa de un hotel de lujo, cuyo nombre se reserva, además de 10 secretarias y una azafata para cada uno. Su séquito está compuesto por 110 personas.Un total de 450 personas se encargarán de la seguridad de los espectadores, otros cuatro centenares de trabajadores darán de beber a la multitud que se enfrentará a un escenario "nunca visto": un escenario de 72 metros de ancho por 25 metros de profundidad que se elevará 30 metros sobre su base con colores fluorescentes y animales hinchables.
El backstage se está transformando en un cuartel general que albergará 27 oficinas de la organización, con 40 líneas de teléfono y fax. Todo ello se está montando sobre el frío cemento y se desmontará al día siguiente de la última actuación, ya que el club ha acordado que el campo se devuelva tal y como se ha encontrado. Las verjas que separan el césped de las gradas se soldarán de nuevo, y volverán a los hangares de la Policía Municipal las 1.050 vallas que servirán para encauzar la muchedumbre.
Vientos flojos
El capítulo de lluvia y Rolling Stones que recuerdan y repiten los que asistieron al primer día del recital de los Stones de hace ocho años no tendrá continuación. La meteorología indica que las noches del 16 y del 17 soplarán vientos flojos con una temperatura entre 24 y 26 grados.La Policía Municipal está mandando instrucciones a "todas sus unidades" y montará un despliege que durará 10 días. La Policía Nacional y los voluntarios de Protección Civil harán lo suyo para mantener el orden y evacuar a los posibles heridos.
El club del Vicente Calderón contará 30 millones de pesetas por el alquiler del estadio; luego pisarán su césped Madonna y Prince. "Sabemos que los bancos de cemento volverán a romperse porque la gente baila encima de ellos, y que habrá desperfectos en los servicios; pero todo se sustituirá, como el césped, que tiene un seguro de millón y medio de pesetas", explican portavoces del club rojiblanco, que son beneficiarios de otro seguro, "entre 50 y 100 millones", en caso de siniestro.
Otros que van a hacer un aparte para sus clientes es la cerveza Budweisser, que utilizará el tirón musical para vender más botellines a costa de este grupo.
El diseñador Nacho Ruiz lanzará desde el estadio su colección de prendas cómodas; la Caixa de Catalunya vende las entradas para captar potenciales clientes aficionados a la música y dinero menor de edad; el Ayuntamiento de Madrid se encarga de los carteles para asociar su nombre a un grupo que sólo en la capital congregara en dos días a 120.000 personas; Telefónica vende sus discos de Ibertex, a través de los que pueden comprarse las entradas para ver al grupo de Brown sugar y hacer innumerables cosas más; TDK ofrece sus cintas grabadoras, y la cadena Tele 5 se sube en el carro con los derechos de retransmisión del recital.
Mientras, cientos de trabajadores con destornilladores, sopletes y escaladores de altura montan y desmontan dos escenarios gemelos por 21 ciudades europeas.
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