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Borrell acusa a la CEOE de un posible retraso en la reforma fiscal

El secretario de Estado de Hacienda responsabilizó ayer a la CEOE de cualquier retraso que pueda producirse en la elaboración de la reforma fiscal. "La intención del Gobierno es Cumplir los plazos previstos y enviar a las Cortes las nuevas leyes de renta y patrimonio en la primera quincena de julio, antes de que concluya el actual periodo de sesiones", afirmó Borrell.El cumplimiento de estos plazos es posible, según el responsable de Hacienda, "si todo el mundo colabora y se sienta a negociar". Esa colaboración comenzará hoy mismo, con una reunión preparatoria que mantendrán los sindicatos Comisiones Obreras y UGT con los responsables de Hacienda.

El inicio de la negociación de la reforma fiscal con la patronal no tiene todavía fecha ya que está pendiente de la reunión que la CEOE mantendrá el día 12 con los ministros de Economía y Hacienda, Carlos Solchaga, y Trabajo, Luis Martínez Noval, para redefinir el marco de la segunda fase de la concertación social, y si están o no dispuestos a participar en ella.

"Los empresarios no se sentarán a la mesa a discutir la reforma hasta después del día 12; no tienen ninguna prisa", afirmó Borrell, para quien si hay dificultades de plazo no será por nuestra voluntad sino de quienes no quieren sentarse a negociar". Los empresarios, por su parte, se quejan de que el Gobierno no ha cumplido el compromiso de constituir en el plazo de un mes -contado desde el 6 de marzo- una comisión mixta sobre fiscalidad.

La posibilidad de que ese retraso se produzca finalmente no fue descartada por el secretario de Estado de Haclenda, para quien "prorrogar un año más el actual impuesto no sería una catástrofe porque no estamos en una situación de caos fiscal".

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