La CE pide a Francia que anule la ilegal prohibición de importar vacas británicas

Dos gatos muertos en el Reino Unido a causa de encefalopatía espongiforme bovina (BSE) ha reavivado la polémica de las vacas locas británicas afectadas por esta enfermedad de origen desconocido, pero "necesariamente mortal", según expertos de la CE. Francia ha decretado la prohibición radical de importar animales vivos y carne de vacuno procedentes del Reino Unido. La Comisión Europea, que califica esa decisión de "ilegal" por haberse extralimitado en las condiciones que marca el reglamento comunitario, pidió ayer a Francia que anule esa medida.

El gobierno francés ha decidido mantener su postura y el temor en la CE no, es que Francia caiga en la ilegalidad de incumplir un reglamento sino que el resto de los países siga su ejemplo. La normativa europea, aprobada el pasado 7 de febrero, limita la exportación de vacuno procedente del Reino Unido a los terneros vivos de menos de seis meses destinados a su inmediato consumo. El resto de la carne debe ser comercializada desprovista de tejidos nerviosos, linfáticos y otras vísceras, como el bazo, susceptibles de concentrar el agente no identificado que transmite la enfermedad.La alarma sobre el peligro que representa la carne de vacuno procedente del Reino Unido la dio hace un año la RFA al prohibir totalmente la importación. Hoy el gobierno alemán va más allá de la norma y exige que la carne británica importada este también desprovista de huesos. Los científicos apuntan que, en caso de que la enfermedad fuera transmisible- lo que a pesar de la muerte de los dos gatos no esta probado- el índice de riesgo sería de uno sobre un millón, es decir, 50 casos en 30 años.

España

El Reino Unido exporta al resto de la CE 112.000 toneladas al año de carne de vacuno. El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación español no ha adoptado medidas para impedir la entrada de carne del Reino Unido en España. Durante el último año, España fue fundamentalmente un país exportador con más de 40.000 toneladas vendidas en su mayor parte en Alemania e Italia. El comercio de carne de vacuno con el Reino Unido y especialmente las importaciones, son prácticamente nulas. La Comisión Europea, aunque sus expertos insisten en que no hay ninguna prueba que incline a pensar que la encefalopatía bovina sea transmisible a otras especies o incluso hereditaria, ha convocado una reunión urgente para la próxima, semana. Gummer, ministro británico de Agricultura, ha sido citado por la Cámara de los Comunes para explicar la evolución de una enfermedad que afecta a 3.000 explotaciones y a una de cada mil cabezas de vacuno existentes en el Reino Unido. Hasta el momento, se han sacrificado 40.000 reses, pero algunos expertos apuntan a que la eliminación de todo riesgo implicaría exterminar seis millones de animales, una catástrofe económica. El caso es que las medidas sanitarias llevadas a cabo por el Reino Unido y los 400 millones destinados a investigación no han podido impedir la expansión de la enfermedad y la aparición de casos en Irlanda. La encefalopatía espongiforme bovina BSE, causa lesiones irreparables en el cerebro. La causa de estas malformaciones esponjosas se atribuye a una proteína autorreplicante y los expertos no se ponen de acuerdo sobre como se transmite.