Álvarez se arriesga a ser inhabilitado al no comparecer por tercera vez
El presidente de la Empresa Municipal de la Vivienda (EMV), Luis Álvarez, no compareció ayer por tercera vez consecutiva ante la comisión de asuntos profesionales del Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid (COAM) que investiga el supuesto cobro de comisiones a cambio de la adjudicación de proyectos, que había denunciado recientemente el arquitecto Ignacio Vicens.La no comparecencia de Alvarez podría ser objeto de sanciones por parte del COAM. Según declaró la semana pasada el decano del Colegio de Arquitectos, Luis del Rey, si Álvarez mantenía su postura el asunto podía pasar a la comisión deontológica, capacitada para proponer sanciones que van desde la inhabilitación temporal o definitiva hasta la expulsión del colegio.
Sin embargo, estas sanciones, que deberán ser ratificadas por la junta del gobierno del COAM, no podrán adoptarse hasta que el decano regrese el próximo 10 de junio de un viaje a Canadá.
Luis Álvarez ha escudado sus incomparecencias al asegurar que no asistiría mientras la comisión de asuntos profesionales del Colegio Oficial de Arquitectos estuviera presidida por Rafael Martínez-Turmo, quien, a su juicio, no ofrece las suficientes garantías de imparcialidad. Rafael Martínez-Turmo acaba de ser ratificado en su puesto por la Junta de Gobierno.
Fedatario público
Por otra parte, el secretario del Ayuntamiento de Madrid, José Mario Corella, impidió ayer el acceso del notario que acompañaba al constructor Christian Jiménez a la comisión de vigilancia de la contratación que investiga las presuntas irregularidades."Yo no admitiré nunca la presencia de otro fedatario público en una sesión en la que yo esté dando fe. No puedo permitir que se ponga en duda mi actuación en el ejercicio de mi profesión", explicó Corella al término de una reunión de la comisión convocada para estudiar la denuncia formulada por el arquitecto Ignacio Vicens. Todos los grupos políticos políticos indicaron que en el Ayuntamiento quien da fe notarial es el secretario general.
Christian Jiménez, propietario de la empresa Escorel SA, había enviado una carta notarial al Ayuntamiento ofreciéndose a comparecer ante la comisión municipal después de haber presentado en el COAM un informe que contenía denuncias contra la EMV por supuestos favores concedidos a empresas de la construcción.
Ante los medios de comunicación, Jiménez, que no pudo entrar con un notario, afirmó que la comisión era una "mascarada" y añadió que había recogido nuevos datos sobre la Empresa Municipal de la Vivienda que iba a denunciar ante el juez.
"Vengo a exponer datos a personas que son representantes de un organismo que yo he denunciado, y traigo un notario que dé fe imparcial de las declaraciones", declaró el constructor.
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