Un simple pedazo de tela provocó la explosión del cohete Ariane

El cohete Ariane estalló en vuelo el pasado 22 de febrero debido a que un simple pedazo de tela obstruyó el circuito de alimentación de agua de uno de los motores Viking V, lo que provocó su caída de potencia y la explosión del ingenio seis segundos después de iniciar su ascenso.En un comunicado divulgado ayer por Arianespace, el consorcio que gestiona los lanzamientos del cohete europeo, se explica que la válvula principal de agua y la conexión principal del motor de la primera fase fueron trasladados de la Guyana a Francia el martes pasado para someterlos a pruebas en sus laboratorios de Saclay, en la región de París. Los análisis han confirmado la hipótesis inicial de que fue la obstrucción del conducto la causa del desastre y han permitido detectar que fue un pedazo de tela el que lo obstruyó. Este, según un portavoz, pudo haberse introducido en el conducto durante los trabajos de ajuste del circuito.

En la conferencia de prensa que dio el lunes para dar a conocer los resultados de la comisión de investigación del accidente, Frederik D'Allest, presidente de Arianespace, anunció que dicha comisión había efectuado 44 recomendaciones técnicas que serian incorporadas al Arlanc-4. También aseguró que el lanzamiento del primer satélite del sistema Hispasat, previsto para junio de 1992, no sufriría retraso.