Las cuentas de Engelmajer

F. SALES / A. A. Pilar Álvarez, del Plan Nacional sobre Drogas (PNSD) asegura que éste no subvenciona a El Patriarca, igual que la Administración central, aunque la asociación, introducida en España en 1979, percibe -o ha percibido, desde 1984- ayudas de diversas administraciones locales o provinciales. Incluso Cáritas ha tenido relación con la asociación, según un estudio del PNSD. Además del Ayuntamiento de Madrid, que proporciona becas a 270 madrileños para desintoxicarse, otras corporaciones conceden ayudas a jóvenes sin recursos. Según familiares de toxicómanos y ex adictos, la mensualidad que se paga en El Patriarca ronda las 40.000 pesetas.

Veinte ayuntamientos -entre ellos el de Bilbao, Getafe, Majadahonda, o Algeriras- conceden o han concedido becas a personas sin recursos. Los ayuntamientos de Pamplona, Valencia y Denía han cedido edificios. Navarra, Cáceres, Valencia, Lugo, Salamanca, Lérida, Gerona y León han cedido edificios y /o han subvencionado plazas de rehabilitación. Desde 1985, se han ido retirando las subvenciones, según Alvarez. Después del periodo de 1982 a 1985, en que sí disfrutaban de ayudas, la contabilidad oficial de la asociación tuvo en 1987 un déficit de casi diez millones de pesetas, que pudo incrementarse en los balances de 1988.

El balance económico de El Patriarca en 1987 contrasta con los de los dos años precedentes, en los que se logró un superávit de más de 42 millones de pesetas. El gabinete contable de El Patriarca ha asegurado que la institución ingresó en 1987 más de 442 millones de pesetas, de los que aproximadamente un 33% provenían de de becas, conventos o ayudas exteriores concedidos por entidades públicas, privadas, ayuntamientos y otros órganos administrativos. La asociación tuvo en este mismo año unos gastos de más de 451 millones y un déficit total de nueve millones de pesetas. En estos balances no se incluye el patrimonio inmobiliario que posee en España, formado por tinos 15 edificios y otros 45 cedidos.