La estética de los puentes
El ingeniero José Antonio Fernández Ordóñez ingresa en la Real Academia de Bellas Artes
El ingeniero de caminos, canales y puertos José Antonio Fernández Ordóñez, de 56 años, leerá hoy, a las siete de la tarde, su discurso de ingreso en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, de Madrid, en torno a El pensamiento estético de los ingenieros. Funcionalidad y belleza. Será contestado por Jesús Aguirre, duque de Alba, que, junto a Federico Sopeña y José María García de Paredes, fallecido el 6 de febrero, presentaron su candidatura.
Catedrático de Historia v Estética de la Ingeniería desde 1981 en la Escuela de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de Madrid, José Antonio Fernández Ordóñez tiene en su biografía dos maestros: su padre, ingeniero desde 1929, creador de Pacadar, firma pionera en la fabricación de piezas prefabricadas de hormigón pretensado, en los años cuarenta, y el Ingeniero francés Eugene Freyssinet, inventor del hormigón pretensado, "el más grande constructor de todos los tiempos".En su discurso de académico electo en Bellas Artes, Fernández Ordóñez va a recorciar también a los grandes nombres de la ingeniería, como Telford, Eiffel, Torroja, Roebling, Fernández Casado, Maillart y Nervi, y sus preocupaciones estéticas. El discurso va a recorrer la dialéctica entre la belleza y la funcionalidad. "En ingeniería civil", declara, "todas las teorías son legítimas, pero lo importante es lo que se hace y no lo que el ingeniero piensa. En nuestro caso, se nos exige, además, que las construcciones sean funcionales., baratas, rápidas y también hermosas. Son los riesgos que hay que asumir junto con la humildad ante las fuerzas de la naturaleza. Las obras de ingeniería no crecen orgánicamente; comienzan ya en el momento que el hombre inventa la rueda, algo que no tiene análogo en su cuerpo ni en la naturaleza".
Una de las previsibles tareas del nuevo académico será atender las consultas sobre el patrimonio monumental. En su trabajo profesional y desde la cátedra realiza una amplia labor de restauración de puentes, como el puente romano y el puente Verde de Granada, los puentes de Algete y Aldea del Fresno y el informe para el Consejo de Europa sobre el Pont du Gard, en Francia. Con el equipo de la cátedra, donde figuran Mercedes López García, Tomás Abad y Pilar Chías, ha publicado el Catálogo de 90 presas y azudes españoles anteriores a 1900 y el Inventario de los puentes de la provincia de León anteriores a 1936, dentro de un programa de estudios sobre puentes, presas, canales, estaciones de ferrocarril y faros que constituyen la arqueología industrial.
El nuevo académico compara a Freyssinet con Picasso y a Telford con Velázquez, lo que recuerda su vinculación a artistas y, arquitectos, como Lucio Muñoz, Antonio López, Julio López Hernández, Sempere, Chillida, Casto Fernández Shaw y, Alejandro de la Sota. En su opinión, nadie como Chillida ha concebido el hormigón con tanta "sensibilidad estética, originalidad técnica y esencial naturalidad". El ingeniero opina que todo aprendizaje debería empezar por el estudio de lo bello y reivindica lo contemporáneo en un sentido amplio. "Hace tiempo que mis contemporáneos son Cayo Julio Lácer, que hizo el puente de Alcántara, y, Antonio da Ponte, autor del puente de Rialto en Venecia". Fernández Ordóñez ha realizado, con Julio Martínez Calzón, entre otras obras, los puentes de Juan Bravo, en la Castellana de Madrid; el del Milenario de Tortosa, de Martorell y Alcoy, y los más recientes del Centenario de Sevilla y en el cauce del Turia, en Valencia. En su opinión, el puente es el paradigma de la obra pública, que exige "potencia, libertad e independencia muy fuertes".
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