La Seguridad Social pide más de 5.400 millones y hasta 18 años a los acusados de fraude

El secretario general de la Seguridad Social, Adolfo Jiménez, aseguró ayer que el proceso contra el centenar de empresarios y funcionarios que defraudaron a la Seguridad Social hace casi ocho años, y a los que se pide 5.485 millones de pesetas y 18 años de cárcel, "es el más importante en la lucha contra el fraude que se ha producido en España".

Durante la presentación del cierre preupuestario de la Seguridad Social de 1989, Jiménez puntualizó que la deuda de los 91 empresarios, cinco funcionarios y ocho asesores laborales con la Seguridad Social supera los 5.485 millones de pesetas. "Aunque aún no hay señalamiento para el juicio oral", señalo Jiménez, "Ia Seguridad Social sigue actuando como acusador privado y pide hasta 18 años para algunos funcionarios y hasta siete para alguno de los empresarios".Jiménez reconoció que el plazo para la resolución de este delito "es muy dilatado, lo que no favorece la lucha contra el fraude". Los trámites aún se prolongarán durante este año al menos ya que, después de que se fije la fecha para el juicio oral, "para el que es difícil hasta encontrar un lugar físico ya que afecta a más de 200 personas", éste durará tres o cuatro meses.

La lucha contra el fraude en la Seguridad Social fue uno de los aspectos destacados por el secretario general al evaluar el cierre de¡ ejercicio. Durante el pasado año, "se ha dado un fuerte impulso a la función recaudatoria y la lucha contra el fraude".

Esa lucha se ha apoyado en el acceso al conocimiento de los depósitos bancarios de los deudores en vía ejecutiva, con el establecimiento de responsabilidad solidaria para los que siendo depositarlos de bienes embargables consientan en su levantamiento. A esto se une la obligación de los funcionarios de suministrar información cuando afecte a la recaudación, y en la creación de la especialidad de cuerpos de Gestión y Administrativo de la Seguridad Social.

La recaudación ejecutiva ascendió el pasado año a 63.098 millones de pesetas, un 15,3% superior a la de 1988. Más del 82% de esa recaudación ejecutiva corrió a cargo de las unidades de recaudación (URES), creadas en 1988, y el resto a Magistratura el Trabajo.

Cierre del presupuesto

El gasto total de la Seguridad Social (tras excluir las amortizaciones) fue en 1989 de 5.857.772 millones de pesetas, con unos ingresos de 5.886.120 millones, con un crecimiento en ambos casos superior al 15%. Las cotizaciones sociales aportaron el 68% de esos ingresos, y las transferencias del Estado y de otros organismos autónomos el 30% restante. El gasto de la Seguridad Social se destinó en un 64% a prestaciones económicas, un 31% a asistenci sanitaria y un 2,5% a servicios sociales.

El número de afiliados a la Seguridad Social aumentó en 1989 en 531.762 personas -un 15,3% sobre los 12,3 millones totales-.Este aumento supera al total de nuevos puestos de trabajo creados el pasado año debido, según reconoció Adolfo Jiménez, "al afloramiento de la economía sumergida y a la presión de los sindicatos para que las empresas regularicen la situación laboral de algunos de sus trabajadores".