El fiscal pide 29 años para un enfermero, acusado de matar a su ex esposa

José Ramón Suárez negó ayer haber matado a su ex esposa, la enfermera Sofía Bragado, hace poco más de un año en un portal del barrio del Pilar de Madrid. El presunto parricida compareció ante la Audiencia Provincial de Madrid en la causa que se sigue contra él y que quedó ayer vista para sentencia. Suarez negó también haber maltratado a Sofía y a sus dos hijos, pese a que su ex esposa le hubiese denunciado en varias ocasiones por este motivo. Sofía Bragado, de 46 años, murió horas después de que fuera agredida en la noche del 30 de enero de 1989, cuando regresaba, alrededor de las 11 de la noche, a su casa. El atacante utilizó un arma blanca -un bisturí, al parecer- y le asestó cinco golpes, uno de las cuales le dañó gravemente el corazón, según los peritos forenses que declararon ayer.Tanto en la sala como fuera de ella se concentraron alrededor de un centenar de mujeres representando a 50 organizaciones, enlutadas y luciendo un adhesivo con el nombre de la víctima. Ana María Pérez, presidenta de la Asociación de Mujeres Separadas y Divorciadas, que se personó en el sumario, recordó que en 1989 murieron 84 mujeres a manos de sus maridos.

La fiscal elevó en sus conclusiones en dos años la petición de pena para el acusado, de 47 años y también enfermero, y solicitó 29 años de prisión por un delito de parricidio, con premeditación y alevosía. La acusación privada, ejercida por la familia de la víctima, demanda 30 años de cárcel. La defensa pide la libre absolución del procesado, basándose en la ausencia de pruebas concluyentes.

Premeditación y alevosía

Mientras la defensa trató de demostrar que el acusado se encontraba en un piso-taller cercano a. su domicilio a la hora en que Sofía fue agredida, apoyándose en el testimonio de la actual compañera de Suárez y de un ceramista con quien compartía ese taller, la acusación recurrió al testimonio de un vecino de la víctima, que reconoció al acusado como al agresor de Sofía, y a quien posteriormente siguió. La acusació aludió también a la comparecencia de una vecina que auxilió a la víctima tras la agresión y que declaró que ésta le comentó, antes de ser evacuada del portal: "Menuda paliza que me ha dado Ramón".La hija, Olga, de 19 años, y los cuñados de la víctima, declararon que José Ramón no sostenía a la familia de su ex mujer tras la separación, hasta que no se le retuvo la nómina. Olga aseguró que ni ella, ni su hermano, de 15 años, deseaban ver al padre. Todos aseguraron que Sofía Bragado había sido maltratada en varias ocasiones.