El déficit comercial creció un 36% y superó los 3,2 billones de pesetas

El déficit comercial (diferencia entre las importaciones y exportaciones de mercancías) registró un espectacular crecimiento en 1989 al alcanzar los 3,2 billones de pesetas, según datos de la Dirección General de Aduanas. Ello supone un incremento del 36% respecto al año anterior y superar en 200.000 millones de pesetas las previsiones iniciales. El déficit por cuenta corriente, que recoge las relaciones con el exterior de forma más amplia (incluye la balanza comercial, los flujos financieros del turismo y las transferencias públicas y privadas), ha ascendido a 11.642 millones de dólares, lo que supone una notable desviación de la previsión inicial de 10.000 millones y cuatro veces el de 1988.

El creciente desequilibrio de la balanza comercial ha sido consecuencia de un elevado incremento de las importaciones, en torno al 20%, básicamente productos energéticos (25%) y bienes de equipo de transporte (40%), y un aumento moderado de las exportaciones próximo al 12%. Esta distinta evolución de compras y ventas exteriores ha rebajado la tasa de cobertura (porcentaje de importaciones que se cubre con las exportaciones), que ha pasado del 66% en 1988 al 62% en 1989.No obstante, según el registro de caja que elabora el Banco de España, el déficit comercial a finales de 1989 fue de 2,9 billones de pesetas. En este caso, las cifras reflejan más los flujos financieros del comercio exterior que el tráfico real de mercancías.

El desequilibrio de la balanza por cuenta corriente se ha agudizado básicamente por el fuerte déficit de la balanza comercial y por un cambio de signo en los flujos por turismo, cuyo saldo ascendió a 1.559 millones de dólares frente a los 1.675 millones de 1988. El comportamiento negativo del turismo fue debido tanto a una disminución de los ingresos como a un aumento de los pagos.

El déficit por cuenta corriente ha experimentado un crecimiento notable durante los dos últimos meses del año, que son los que registraron un aumento más fuerte. En diciembre, el déficit fue de 1.692 millones de dólares, y en noviembre, de 1.551 millones.

Durante el pasado ejercicio, el incremento de las reservas centrales fue de 4.547 millones de dólares, aumento inferior al registrado en el año anterior, que fue de 9.703 millones de dólares. A finales de 1989, el saldo de las reservas centrales ascendía a 44.422 millones de dólares.

Las inversiones extranjeras experimentaron un incremento notable, al pasar de los 9.459 millones de dólares en 1988 a los 16.636 millones en 1989. Los créditos extranjeros registraron una reducción de 4.643 millones de dólares a 2.862 millones. Ello es consecuencia de la introducción, a comienzos del año, del depósito previo del 30% a las disposiciones o utilizaciones de préstamos y créditos financieros exteriores.

La balanza básica registró un superávit de 6.066 millones de dólares frente a los 7.720 millones de 1988.

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