Joaquín Estefanía: "Una ley que regule el derecho a la información es una amenaza a la libertad"

"Una ley que regule el derecho a la información es una amenaza a la libertad de expresión", afirmó ayer el director de EL PAÍS, Joaquín Estefanía, en la inauguración del curso académico 1990 de la Escuela de Periodismo UAM-EL PAÍS, celebrada en el salón de actos de la facultad de Ciencias Económicas de la universidad Autónoma de Madrid. En el acto se entregaron los diplomas a la tercera promoción de la escuela. Cayetano López, rector de la universidad, y Jesús de Polanco, presidente de PRISA, dieron la bienvenida a los nuevos alumnos. Al acto asistió también Juan Luis Cebrián, consejero delegado de PRISA.

El director de EL PAÍS planteó en su conferencia , titulada Quién controla a los periodistas, la necesidad de abrir un debate urgente entre la profesión periodística real sobre los nuevos problemas que le afectan; entre ellos, la necesidad de una autorregulación que limite las tentaciones de algunos políticos de establecer una ley antilibelo para corregir los errores y falsedades que se publican en los medios de comunicación. "La autorregulación del periodismo español y la aplicación de un código deontológico que dignificaría al colectivo de los preriodistas ante nuestros lectores son medidas que siempre han tenido un carácter progresista", afirmó.Joaquín Estefanía reconoció que la Prensa padece de dos abusos que limitan su credibilidad: el amarillismo (cuyo ejemplo más expresivo sería un titular a toda página de un diario inglés que decía: Confirmado: Hitler era una mujer), que conculca principios constitucionales de los ciudadanos afectados, y el corporativismo, que busca su justificación en los grandes principios y en la defensa del interés general. "La defensa de la libertad de expresión pasa por el establecimiento de los mecanismos de transparencia en el ejercicio de esta profesión, a fin de no arruinar el único patrimonio de nuestro oficio: la credibilidad. Porque en la mención abusiva de la libertad de expresión y de información se escudan sus enemigos para negar las críticas legítimas y la labor de control del poder, incluido el de los propios periodistas y de los medios de comunicación". El director de EL PAÍS señaló asimismo que, aunque existen fuertes tensiones entre la Prensa y el Gobierno socialista, "corremos el riesgo de padecer de amnesia histórica y caer en la más vacua de las tonterías, consistente en comparar las relaciones actuales entre Prensa y poder con las existentes en el régimen anterior. Así, muchos días tenemos que pasar por la vergüenza de leer analogías, por ejemplo, entre el felipismo y el franquismo precisamente en los medios de comunicación más comprometidos con la pasada dictadura del general Franco".

Carácter centenario

Con los 37 alumnos de la tercera promoción, que ayer recibieron sus diplomas de graduación, la escuela de periodismo UAM-EL PAÍS adquiere "carácter centenario", en humorística expresión de su director, el sociólogo Juan José Toharia. Con ellos, en efecto, se eleva a 100 la cifra de graduados por la joven escuela. A los nuevos periodistas les espera, según dijo, un porvenir profesional prometedor si se tiene en cuenta que prácticamente el ciento por ciento de los componentes de las dos promociones anteriores encontraron trabajo inmediatamente en toda clase de empresas de la comunicación; algunos de ellos, dentro de las del grupo PRISA. De hecho, varios de los profesionales de esta tercera promoción han empezado ya a trabajar o están a punto de hacerlo en periódicos y emisoras de radio de ámbito nacional.Toharia anunció que existe el proyecto de un master europeo de periodismo en el que participarán ocho grandes periódicos europeos, EL PAÍS entre ellos. Tras la lectura de la memoria del pasado año académico por la secretaria general de la escuela, Amelia Guardiola, cerraron el acto los dos copresidentes del patronato, Jesús de Polanco, presidente de PRISA, y Cayetano López, rector de la UAM. De Polanco dio la "bienvenida" a las dos promociones: a la que ahora inicia su formación, pero también a la que finaliza, en la medida en que sus componentes se incorporan ya al oficio periodístico. El presidente de PRISA expresó a unos y a otros su convicción de que llegará a sentirse tan orgulloso de la formación que han recibido en la escuela y de su posterior ejercicio profesional como lo está de los profesionales que hacen posible diariamente el éxito del diario EL PAÍS, al tiempo que rectificó a Joaquín Estefanía en el sentido de que los profesionales del periódico "sí son los protagonistas", aunque, claro está, no de la noticia, sino del producto final del diario.

El rector, por su parte, se congratuló porque la UAM esté formando parte de una "iniciativa educativa original y de calidad" como el master de periodismo. Cayetano López alentó a los nuevos alumnos para que sean "aplicados" y se hagan merecedores de las mismas expectativas profesionales que tienen los ya graduados.