Nuevas propuestas de Peres y Rabin para desbloquear el diálogo con los palestinos
El viceprimer ministro israelí, el laborista Simón Peres, sometió ayer a la consideración del presidente egipcio, Hosni Mubarak, una serie de nuevas propuestas (que respalda también el ministro de Defensa, Isaac Rabin) para desbloquear la situación actual y permitir que se inice el diálogo palestino-israelí en El Cairo.
Entre las nuevas propuestas de Peres destacan cuatro.1. Que uno o dos palestinos del exterior puedan formar parte de la delegación palestina. Podría tratarse de palestinos expulsados de los territorios ocupados, a los cuáles se les autorizaría a volver a sus antiguos hogares para participar en el diálogo.
2. Que palestinos que viven en la parte orienta¡ de Jerusalén podrían también formar parte de la delegación y participar en las futuras elecciones en Cisjordania y Gaza, siempre y cuando el domicilio permanente de estos palestinos se encuentre en los territorios ocupados. Éste es el caso de dos conocidas personalidades: Faisal Huseini y Radwan Abu Ayash.
3. La composición de la delegación palestina sería comunicada por Egipto a Israel y a Estados Unidos, de modo que se rodearía el obstáculo que representa la exigencia de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) de nombrar ella misma los miembros de la delegación palestina para las conversaciones y la frontal oposición israelí, que rechaza toda intervención de la OLP y así reivindica el derecho de veto sobre la delegación palestina.
4. No se excluye la reunión de una conferencia internacional de paz -como exigen los árabes, la URSS y también la Comunidad Europea-, pero siempre que tal conferencia se convoque después del inicio de las negociaciones palestino-israelíes, para que así se refuercen los acuerdos que hayan concluido las dos partes con la garantía internacional de las grandes potencias.
Críticas conservadoras
En el Consejo de Ministros del pasado martes, varios ministros del conservador Likud atacaron con dureza a Peres y Rabin. Ambos fueron acusados de "actuar de forma partidista, sin tener el consentimiento previo del Gobierno". La atmósfera en el Consejo estaba cargada.
El primer ministro israelí y líder del derechista Likud, Isaac Shamir, contaba hasta ahora con la alianza tácita de Rabin para desactivar las maniobras de Peres, que busca desde hace varios meses el modo de hacer saltar por los aires el Gobierno de unión nacional, que, a decir de Peres, "paraliza cualquier progreso en busca de la paz".
Parece que Rabin quiere llegar a un acuerdo con Peres. "Los días del Gobierno de unión nacional están contados", en opinión del diputado laborista Haim Ramon. "Si abandono El Cairo convencido de que podemos emprender la negociación sin tardanza y que solamente el Hkud es el que obstáculo, los laboristas abandonaremos este Gobierno antipaz", dijo Peres a los periodistas israelíes que le acompañan en su viaje a Egipto. Peres ha obtenido el acuerdo de Rabin para formar un Gobierno que dé nuevo impulso al proceso de paz.
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