Las milicias de voluntarios armenios, dueñas de Eriván

Las tropas soviéticas mantuvieron ayer una extrema vigilancia sobre Eriván, la capital de Armenia, sin intentar desarmar a las unidades de milicianos que han asumido de hecho el control de la ciudad. En el aeropuerto de Eriván, a unos 20 kilómetros de la ciudad, el martes por la noche aterrizó una larga serie de aviones de transporte Ilyushin 76 cargados con tropas de refuerzo."No cesaron de llegar durante ayer y el día anterior", relató ayer un empleado del aeropuerto. "Centenares de tropas, tanques y armas", añadió. Los vuelos militares en esta región continuaron a pesar del mal tiempo y la escasez de combustible, que provocaron retrasos de más de 24 horas en los vuelos civiles.

Fuentes oficiales culparon de estos retrasos al bloqueo de seis meses efectuado por la fronteriza República de Azerbaiyán contra Armenia para obligar a sus autoridades locales a renunciar a sus reivindicaciones territoriales sobre Nagorno-Karabaj. Las carencias que ha provocado por este boicoteo han provocado colas de coches ante las gasolineras.

Ante la sede del Movimiento Nacional de Armenia -la organización no oficial que se encarga de reclutar grupos de voluntarios para ir a luchar a la frontera con Azerbaiyán- se hallan reunidos grupos de hombres armados con un surtido de pistolas y cuchillos. Algunas calles más allá han desaparecido las armas y vehículos blindados que fueron alineados junto a la sede del movímiento tras haber sido robados a las tropas regulares.

Robo de armas

Varios voluntarios, que se negaron a dar sus nombres, aseguran que el equipo pesado ha sido devuelto al Estado en un gesto de reconciliación con las autoridades centrales. Sin embargo, según publicó ayer el diario soviético Izvestia, continúa el robo de material militar. El portavoz de Asuntos Exteriores, Guennadi Guerásimov, declaró a la Prensa en Moscú que en los últimos dos días han sido robadas en Armen¡a más de 5.000 armas.

Numerosos residentes en Armenia afirman que existe el temor entre la población de que se produzca una acción similar a la del pasado sábado en Bakú, la capital de Azerbaiyán, donde las tropas enviadas por Moscú intervinieron para aplastar la sublevación nacionalista.

Los habitantes de Bakú seguían ayer sin presentarse a sus puestos de trabajo -como protesta por el sangriento balance causado por dichos sucesos-, a pesar de la prohibición de efectuar huelgas impuesta el martes.

Las huelgas también se produjeron ayer en Eriván, mientras seguían registrándose erífrentamientos entre azeríes y armenios en la frontera entre las dos repúblicas. La violencia se ha extendido también a la cercana Georgia, donde cuatro personas resultaron heridas al descarrilar un tren de pasajeros, procedente de Armenia, en un distrito azerí de dicha república, debido a la destrucción de las vías en ese tramo.