EE se suma a los demás partidos nacionalistas y acepta debatir en el Parlamento la autodeterminación

Euskadiko Ezkerra (EE) anunció ayer su disposición favorable a un debate en el Parlamento vasco sobre el derecho de autodeterminación, siempre que se plantee con seriedad y voluntad de zanjar la cuestión sobre la base de la mayoría resultante. De esta forma, todas las fuerzas nacionalistas vascas han manifestado en los últimos días, aunque con enfoques diferentes, su voluntad de trasladar el debate a la cámara autonómica. El Partido Nacionalista Vasco (PNV) ha terciado en la polémica con críticas para el PSOE y Eusko Alkartasuna (EA).

El secretario general de EE, Kepa Aulestia, lamentó en Bilbao los términos en que se desarrolla la polémica, entre quienes utilizan la autodeterminación para justificar la barbarie terrorista, dijo, y quienes desde otro polo "no ofrecen otra respuesta que la sacrosanta unidad de España". La voluntad de su partido, agregó, es no permitir que la razón profunda de la autodeterminación quede secuestrada por el independentismo. Con objeto de evitarlo, participará en las conversaciones para preparar el camino al debate parlamentario.EE fue la única fuerza política que propuso introducir el reconocimiento del derecho de autodeterminación en la Constitución, recordó Aulestia, y su diputado se quedó sólo en el intento. Pero ahora considera que el debate en la Cámara autonómica puede resultar clarificador de concepciones distintas y contradictorias.

El derecho de autodeterminación que defiende EE, explicó Aulestia, no sirve para apuntalar un nuevo Estado sino para derribar fronteras, y consiste en una suma de todas las decisiones adoptadas libremente por un pueblo, sin más límite que la voluntad ciudadana. El secretario general de EE destacó la voluntad de su partido de evitar un aprovechamiento del debate "para apuntalar la barbarie terrorista".

Pacto de Ajuria Enea

Aulestia reconoció que la exigencia del derecho de autode terminación representa "una incomodidad" para la estrategia del pacto de Ajuria Enea sobre pacificación y la normalización de Euskadi, pero no lo pone en peligro, dijo, "mientras nadie lo cuestione. "Desde el momento que alguien lo hiciera estarían ganando los violentos".El consejo nacional del PNV, por otra parte, ha precisado la intención de su pronunciamiento sobre el derecho de autodeterminación, en una declaración del Consejo Nacional que contiene críticas tanto a la "violenta descalificación" del PSOE como a la intervención de EA, calificada de "partidista y agresiva". El PNV apela al discurso del Rey durante la apertura de las Cortes, cuando don Junan Carlos destacó la amplitud del "sistema democrático para amparar y dar cabida a cualquier objetivo político".

La dirección del PNV considera moderada su toma de posición y la sitúa en el contexto internacional y el voto del Parlamento de Cataluña. El silencio en Euskadi, subraya la declaración, "pudiera interpretarse como olvido, si no como renuncia, de este derecho inherente a todo pueblo o a su abandono a grupos antiinstitucionales".

El PNV lamenta lareacción del Gobierno central y del PSOE, así como las amenazas de ruptura del Gobierno de coalición vasco y considera aún más graves las insinuaciones procedentes del campo socialista sobre una hipotética quiebra del pacto de Ajuria Enea. El Consejo Nacional acusa también a EA de huir de una posición consensuada, y diseñar, en cambio, una política partidista y agresiva "cuestionando y condicionando consensos y acuerdos anteriores como el de Ajuria Enea".

El secretario generad de EA Inazio Oliveri, por su parte, ha iniciado una ronda de contactos con los restantes partidos vascos para concretar la apertura de conversaciones bilaterales. La invitación se cursará también a Herri Batasuna (HB), cuyos dirigentes han mostrado su disposición a acudir al Parlamento vasco para participar en el debate sobre el derecho de autodeterminación. Sin embargo, EA sólo aceptará mantener conversaciones con HB si la coalición hace un pronunciamiento previo de desvinculación de la estrategia violenta, según ha declarado el portavoz de la ejecutiva, Rafael Larreina.

"Para nosotros es muy importante el debate sobre la autodeterminación", señaló Larreina, "pero es prioritaria la pacificación de Euskadi y así lo ha confirmado la última asamblea nacional del partido".

Integridad territorial

Por otra parte, el ministro de Asuntos Exteriores, Francisco Fernández Ordóñez, declaró ayer en Bruselas que el debate de la autodeterminación en el País Vasco y Cataluña "lo único que tiene que ver es la palabra", en referencia al reconocimiento de ese derecho por parte de la CE a Alemania, informa Félix Monteira. Al margen de que los objetivos son distintos, puesto que se trata de suprimir fronteras en lugar de implantar otras nuevas, señaló el ministro, "quienes plantean esto en nuestro país se olvidan de que en las resoluciones de la CE y de la Alianza Atlántica se deja muy claro que se respetará la integridad territorial de los Estados".Para Fernández Ordóñez, la polémica nacional carece de sentido. Explicó que en derecho internacional el término autodeterminación se utiliza en la actualidad exclusivamente referido a procesos de descolonización o a situaciones heredadas de dictaduras, como es el caso "del texto del Acta Final de la Conferencia de Helsinki".

Controles fronterizos

El ministro se refirió también a los problemas que se derivan por el aplazamiento de la firma del Convenio de Schengen, que prevé la desaparición de controles fronterizos entre cinco países comunitarios (RFA, Francia, Holanda, Bélgica y Luxemburgo). España planteó hace meses su ingreso en el grupo de Schengen, pero "ahora el Gobierno deberá tomar una decisión de nuevo sobre este asunto, incluido el proyecto simbólico de abrir totalmente una parte de la frontera con Francia".Los problemas de futuro para la CE, según Fernández Ordóñez, se plantean con vistas al libre tránsito y la exigencia o no de visados para la entrada de extranjeros. España tiene una vertiente delicada en sus relaciones con los países latinoamericanos y el posible fin de un derecho adquirido para sus ciudadanos, porque el resto de los socios comunitarios impone que el visado sea necesario para los viajeros procedentes de América Latina.

El otro gran reto de la Comunidad Europea es la inmigración, y la presidencia francesa decidió ayer iniciar un tour de capitales para recolectar las disposiciones nacionales en este sentido y comenzar a preparar un plan de largo alcance para "responder a este desafío del futuro".