Todos los partidos proponen revisar el sistema de financiación autonómica

Todos los partidos que se presentan a las elecciones gallegas con posibilidades de obtener representación parlamentaria proponen en sus programas la revisión delsistema de financiación autonómica y, en especial, que la prevista reforma del Fondo de Compensación Interterritorial (FCI) acentúe su función redistributiva y reequilibradora.

El partido socialista, en el poder, propugna la modificación del sistema, de financiación y plantea la necesidad de que el FCI se limite a las comnidades autónomas con una renta inferior a la media española. El PSOE pide también una territorialización efectiva" de fondos del Estado. El Partido Popular (PP), serio aspirante a presidir la Xunta, incluye presupuestos parecidos en su voluminoso programa (15 tomos), pero es mucho más crítico. Según el PP, el sistema de financiación actual ha sido desarrollado con criterios restrictivos que lo acercan definitivamente a los modelos centralistas" y debe ser modificado en profundidad. Los populares proponen la futura cesión de nuevos tributos por parte de la Administración central. El principio de suficiencia económica debería regir, para el Centro Democrático y Social (CDS el sistema definitivo de financiación, descentralizando el gasto público de tal forma que el 50% sea gestionado por las comunidades autónomas y las entidades locales. El CDS propone también, en otro orden de cosas, la creación ¿le un impuesto económico sobre el juego del bingo. Esquerda Unida (EU) exige una profunda reforma del modelo actual Y hace propuestas muy concretas sobre el mismo.

Los partidos nacionalistas, moderados y, de izquierdas, insisten en la misma reclamación, pero aportan diferentes propuestas. Coalición Galega (CG) hace sólo consideraciones imprecisas acerca de revisar la participación de comunidad en los tributos del Estado; el Partido Nacionalista Galego-Partido Galeguista (PNG-PG) propone el establecimiento de un sistema de cupo, similar al del País Vasco y Navarra: el Bloque Nacionalista Galego (BNG) reclama una distribución "inmediata" de los recursos estatales de acuerdo con el baremo del 50-25-25 y la revisión de las condiciones de los tributos cedidos; y el Partido Socialista Galego-Esquerda Galega (PSG EG) propone también el sistema del concierto económico, cifrando en un mínimo de 650.000 millones de pesetas el volumen de financiación exigible para 1991 (esta cantidad se ha situado este año en 283.000 millones). Estos últimos partidos son también los más radicales respecto al desarrollo del autogobierno. El BNG, con un discurso más moderado que hace unos años, centra sus propuestas en el ámbito de la financiación y en la asunción de competencias en materia de política económica.

El PSG-EG reclama una reforma del estatuto de autonomía con el fin de conseguir mayor poder político con la mirada puesta en una hipotética confederación de naciones, y la supresión de los Gobiernos civiles. El PNG tiene propuestas semejantes respecto a la supresión de la administración periférica del Estado, pretende también ampliar las competencias económicas y crear un cuerpo de policía autonómica. Esto último se incluye en el programa de CG, que pide completar el proceso de transferencias.

Reforma del estatuto

Esquerda Unida se suma también a la reclamación del traspaso de importantes competencias en materia de política económica, por la vía del artículo 150 de la Constitución, y no descarta en un futuro la reforma del: estatuto desde una perspectiva federal. El CDS propone nivelar el techo competencial de todas las comunidades autónomas, agotando las previsiones constitucionales, y la reforma del Senado.

Por lo que hace al PP y PSOE, el primero de ellos limita sus demandas a las ya referidas en materia de financiación y los socialistas basan su discurso en la potenciación de unas nuevas relaciones con el Gobierno central. También proponen la conversión del Senado en una Cámara territorial.

Las propuestas en materia de política económica tienen en general un alcance limitado debido a que limitadas son también las competencias del Gobierno autónomo en este sentido. Algunos partidos, sin embargo, basan precisamente en la ampliación del marco competencial establecido su programa económico. El BNG propone, por ejemplo, la creación de un sector industrial público y un banco público gallegos, como rasgos más significativos. El PSG-EG también se apunta a la creación de un instituto de crédito gallego y propone la nacionalización de las empresas energéticas.