Los enfrentamientos del Sáhara resucitan la 'guerra de papel' entre Rabat y Argel

Los últimos ataques del Frente Polisario contra posiciones marroquíes en el Sáhara Occidental han logrado resucitar la guerra de papel entre Rabat y Argel. En la segunda de las capitales citadas, los periódicos del Frente de Liberación Nacional (FLN) acaban de reiterar su apoyo a la causa independentista saharaui. En la marroquí se acusa veladamente a Argelia de no respetar el pacto de no agresión sobre el que se constituyó el pasado febrero en Marraquech la Unión del Magreb Árabe.

Un artículo de El Moudjahid, portavoz del FLN, ha hecho sonar la señal de alarma. Sin la resolución del problema del Sáhara, dice, "la unión del Magreb árabe fracasará completamente". Para impedir tan agorera profecía, El Moudjahid sólo ve un camino, "la imposición de la voluntad internacional", esto es, la celebración de un referéndum de autodetermi nación que "permita al pueblo saharaui disfrutar de su independencia, a la imagen y semejanza de los otros pueblos de la región". Paralelamente, Revolution Africaine, otro órgano del FLN argelino, dedica toda su portada al conflicto del Sáhara Occidental con el titular "RASD (República Árabe Saharaui Democrática), el alba de la independencia".En Argelia, fuentes próximas al presidente Chadli Bien yedid señalan que ésa es la posición del FLN, pero ¡que, dado que el proceso reformista en curso tiende a separar al hasta hece poco partido único del Estado. no es necesariamente la posición del Gobierno. Esas bfuentes no precisan cuál es la posición de la presidencia y del Gobierno, pero a las autorida des marroquíes les sirve esa ex plicación, y, por tanto, callan.

En vísperas de la reciente votación sobre el Sáhara Occidental en la cuarta comisión de la ONU, Chadli Benyedid y Hassan II negociaron un texto que fue aprobado por consenso en dicho foro internacional y que estimula la continuación del "diálogo directo" entre el rey de Marruecos y el Frente Polisario. El momento actual, no obstante, parece lógico propicio a ese diálogo. Hassan II sigue retrasando su segundo encuentro personal con el Polisario, y esta organización, por su parte, ha emprendido en las últimas semanas una auténtica escalada militar.

Pese al silencio oficial, la oposición marroquí no ha pasado por alto las últimas tomas de postura a favor de los independentistas saharauis de El Moudjahid y Revolution Africaine. "La hipótesis de un estallido de la Unión del Magreb Árabe", ha escrito el diario comunista Al Bayane, "no es una hipótesis fantasiosa. Por ejemplo", prosigue, "puede suceder si los Estados firmantes del tratado de Marraquech violan por sistema y con alevosía las disposiciones que prohíben la injerencia en los asuntos internos de sus socios y la presencia en sus territorios de santuarios de fuerzas hostiles a cualquiera de las partes del tratado". El santuario aludido es la región argelina del Tinduf, donde los independentistas saharauis tienen sus campamentos.

Al Bayane ha acusado directamente a Argel de estar detrás de la ofensiva polisaria.

En pocas semanas el Polisario ha atacado a las fuerzas armadas reales en Guelta Zemur, Hausa y Amgala, causándoles importantes pérdidas humanas, reconocidas por el propio Marruecos. Con estos tres ataques, el último el pasado miércoles, el Polisario ha probado que, en contra de la tesis marroquí de los últimos tiempos, sigue contando con hombres y armas suficientes para emprender operaciones de envergadura.

Los preparativos de esos ataques, según fuentes militares independientes, tuvieron que ser conocidos por los responsables de la región militar argelina de Tinduf.