Defensa asegura que dará cobertura contra accidentes a quienes se incorporen al servicio militar en 1990

Los 230.309 jóvenes que iniciarán el servicio militar en 1990 tendrán por vez primera un completo sistema de cobertura asistencial para caso de accidente, según el subsecretario de Defensa, Gustavo Suárez Pertierra. Los destinos de los 215.589 mozos de reclutamiento forzoso (14.720 corresponden a voluntariado normal y milicias universitarias) se sortean hoy en Sevilla. La mili de la quinta del 90 durará un año, pues la reducción de tres meses se iniciará en 1991.

El Ministerio de Defensa y el de Economía y Hacienda tienen ya ultimado un decreto que prevé el pago de pensiones e indemnizaciones a los jóvenes que resulten lesionados en accidentes "de carácter militar", durante la realización del servicio en filas, así como a los familiares de quienes fallezcan o desaparezcan en dichos accidentes.La intención de Defensa es que este decreto, al que actualmente se dan los últimos retoques antes de que pase a dictamen del Consejo de Estado, sea aprobado por el Gobierno en una de sus últimas reuniones de este año. Aunque la tramitación impidiera su entrada en vigor para el 1 de enero de 1990, una claúsula permitirá aplicarlo, con carácter retroactivo, a los accidentes ocurridos a partir de esa fecha e incluso a los expedientes iniciados desde el 1 de enero de 1985.

Este decreto, según el subsecretario del Ministerio, Gustavo Suárez Pertierra, será la primera medida adoptada por Defensa en desarrollo de la ley Reguladora del Régimen del Personal Militar Profesional, cuya entrada en vigor se producirá el primer día del ano próximo. La disposición adicional 14ª de la citada ley, introducida como enmienda por el Grupo Socialista del Senado, recoge el derecho a pensión de los jóvenes que se inutilicen para todo tipo de trabajo durante el servicio militar, o de los familiares de quienes fallezcan o desaparezcan, "siempre que sea en acto de servicio o como consecuencia del mismo". La misma disposición extiende el derecho a percibir pensión o indemnización a quienes sufran Iesiones permanentes no invalidantes o no determinantes de inutilidad absoluta para todo trabajo".

Vacío desde 1985

La novedad de la enmienda socialista radicaba en ampliar el derecho a pensión o indemnización, a quienes sufran una lesión no invalidante para todo trabajo, pues tanto la muerte como la inutilidad absoluta venían ya recogidas, por la ley de Clases Pasivas. Hasta el 1 de enero de 1985, los lesionados en el servicio militar podían incorporarse al Cuerpo de Mutilados, y así lo hicieron 169 jóvenes en 1983 y 163 más en 1984. Sin embargo, a partir de esa fecha desparecieron tanto esta posibilidad, como el derecho a una indemnización de 100.000 pesetas y una ayuda de 10.000 pesetas por fallecimiento.Defensa podría haber regulado sólo las nuevas ayudas, pero ha preferido agrupar en un único decreto todas las pensiones e indemnizaciones derivadas de las lesiones o muertes que se produzcan como consecuencia del servicio militar, fijando el derecho a percibir unas u otras y la cuantía de las mismas. Figurará en una tabla específica que se negocia con Hacienda, en función del grado de incapacidad.

Según Suárez Pertierra, "no es que exista ahora un problema de desprotección, sino que resulta muy dificil que funcionen en la práctica elementos de protección que pertenecen a diferentes regímenes de una manera correcta". Uno de los objetivos del decreto es, precisamnete, "agilizar los procedimientos de concesión" de las ayudas, reduciendo el número de documentos exigidos.

La aplicación del nuevo sistema a. los expedientes iniciados a partir del 1 de enero de 1985 pretende paliar el vacío legal que existe desde que se suprimieron el ingreso en el Cuerpo de Mutilados y las indemnizaciones.

Fuentes de Defensa cifran en unos 500 los casos que podrían beneficiarse de la aplicación retroactiva del decreto. Sin embargo, en una respuesta parlamentaria fechada en julio de 1988, el Ministerio limitaba a 18 el número de expedientes por inutilidad física que se estaban tramitando.

400 millones

El decreto de pensiones e indemnizaciones no dará, sin embargo, cobertura a las víctimas de accidentes ocurridos durante el servicio militar cuya causa no esté directamente relacionada con el mismo, que son mayoría, según los datos de Defensa. Para hacer frente a estas situaciones, el departamento prevé la contratación de un póliza de seguros que garantice determinadas ayudas en caso de muertes o lesiones fuera. de acto de servicio.La contratación de la póliza no se llevará a cabo hasta después de la aprobación del decreto, pero Defensa pretende que sus beneficios se apliquen a todo accidente que tenga lugar a partir del próximo 1 de enero. Desde hace dos ejercicios el Ministerio cuenta en sus presupuestos con una partida de 400 millones de pesetas destinada a este fin y ya ha iniciado conversaciones con la Dirección General de SDeguros para su puesta en práctica.

La existencia de dos clases de cobertura, una para accidentes de carácter militar, con cargo al sistema de clases pasivas del Estado, y otra para accidentes de carácter no militar, mediante la contratación de una póliza de seguros, obligará a determinar con mayor precisión la causa de los siniestros. Suárez Pertierra reconoce que "uno de los temas técnicos que hay que matizar todavía" es si el accidente sufrido por un soldado en el desplazamiento del domicilio al cuartel se considera o no de carácter militar.