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El consejo de Jaguar recomienda a sus accionistas la venta a Ford

Jaguar, el fabricante británico de coches de lujo, aceptó ayer la oferta de 1.600 millones de libras (unos 300.000 millones de pesetas) realizada por Ford, el número dos del mundo del motor, por la que se convierte en compañía subsidiaria del gigante norteamericano. La operación quedó cerrada menos de 48 horas después de que el Gobierno anunciara su decisión de renunciar al derecho de veto sobre una eventual opción a la propiedad de Jaguar. Con el acuerdo, la firma británica garantiza su futuro y la norteamericana añade una marca de prestigio a su cartera.

Ford remató ayer una operación iniciada a mediados de septiembre, que le había llevado a controlar ya el 13,2% de Jaguar ante la impotente mirada de sir John Egan, presidente de la sociedad británica, quien llevaba tiempo buscando socios que dieran viabilidad a Jaguar, pero no deseaba aliarse con una Ford que no le garantizaba autonomía. En el comunicado conjunto hecho público ayer, ambas entidades anunciaban que Jaguar seguirá siendo una entidad legal independiente con su propio consejo de administración.General Motors (GM), el principal rival de Ford, era el socio aparentemente deseado por Egan y con el que éste había abierto negociaciones para una pequeña participación, pero General Motors anunció que no le interesa Jaguar al precio puesto por Ford y que no había obtenido ninguna presencia accionarial en la entidad.

El mercado acogió con desilusión el anuncio del acuerdo por el que Ford se compromete a pagar 850 peniques por acción, porque esperaba que, una vez levantado el veto gubernamental, dos o tres entidades -la tercera sería la alemana occidental Daimlr-Benz, que ayer no realizó comentario alguno- iban a luchar por el control de Jaguar y presentar hinchadas ofertas.

Los analistas del sector, sin embargo, consideran que la oferta norteamericana es de lo mejor a que podían aspirar los británicos. "Jaguar ha dado un golpe al conseguir 1.600 millones para la compañía. No hay activos que justifiquen ese precio", decía un analista, dictamen con el que coincidió GM, para la que las acciones de Jaguar valen "significativamente menos" que lo ofrecido por su rival. "Ford está pagando por poseer una marca de prestigio. Este acuerdo da seguridad a Jaguar, que es probable inicie un periodo de expansión" según señalaba el mismo analista.

Egan se felicitó por el, pacto dijo que "hubiese sido traicionar los intereses de los accionistas e rechazar la oferta" de Ford, quc garantiza una cobertura comercial y tecnológica imprescindible para Jaguar, convertido en un minúsculo participante en la escena mundial del motor al fabricar sólo 50.010 vehículos al año.

Dependencia de EE UU

Jaguar, por lo demás, es muy dependiente del mercado norteamericano, al que exporta el 43% de su producción. Cada céntirrio que la libra pierde con respecto al dólar le cuesta a Jaguar 3,5 millones de libras, y le va a resultar difícil cerrar el actual ejercicio con números negros.Jaguar fue privatizada hace cinco años, y lo que era un desastre tecnológico y financiero se convirtió en un brillante éxito, grandemente favorecido por la buena relación de cambio de la fibra con respecto al dólar. El Gobierno se reservó entonces, hasta diciembre de 1990, el derecho de vetar la participación de un solo socio por encima del 15% pero su renuncia a ella el pasado martes desencadenó el asalto final de Ford, que ansiaba desde hace años poseer una marca europea de prestigio, ya que la microscópica Aston Martin no añadía nada de fundamento a esas aspiraciones. En 1986 intentó hacerse con Alfa Romeo, que acabó bajo el control de Fiat, y los últimos meses ha estado tanteando a los suecos de Saab, con quienes rompió negociaciones hace escasas jornadas.

El acuerdo de Ford y Jaguar será efectivo una vez lo apruebe el 75% del accionariado, condición impuesta por el Gobierno para renunciar a su derecho de veto.

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