El Cocom se mantiene inflexible ante los países del este europeo

., La reunión del Comité Multilateral de Control de las Exportaciones al Este (Cocom), iniciada secretamente el miércoles en París, concluyó ayer con resultados "moderadamente positivos", según fuentes diplomáticas, pero sin que se lograran mayores facilidades para exportar tecnología a países como Polonia y Hungría.

El moderado optimismo con que los 17 países miembros (los de la OTAN menos Islandia, Japón y Australia) salieron del hotel parisino en que se habían citado responde a dos puntos. Por un lado, se controlará más estrechamente a los países de reciente industrialización, que ya poseen un cierto nivel técnico y que, al no pertenecer al Cocom, exportan tecnología de doble uso (civil y militar) a los países socialistas. Por otro lado, se ha decidido simplificar la prolija lista de artículos de exportación prohibida.

Pero queda sin resolver el problema fundamental: las posturas entre los halcones de EE UU, atrincherados en el Pentágono, y todos los demás socios del Cocom. Los duros se niegan a flexibilizar los controles de exportación, invocando la "seguridad occidental". Los demás aliados consideran que países como Hungría y Polonia, pese a permanecer todavía en el Pacto de Varsovia, merecen un trato preferente, similar al que disfruta China.