La resolución en la ONU sobre el Sáhara satisface a polisarios y marroquíes

Marruecos y el Frente Polisario han interpretado como una victoria de sus respectivas posiciones la aprobación por consenso, en la noche del miércoles, de una resolución sobre el Sáhara occidental en la Cuarta Comisión de las Naciones Unidas, reunida en Nueva York.

Marruecos subraya que la resolución aprobada no exige "negociaciones directas" entre las partes implicadas en el conflicto de la antigua colonia española y se limita a solicitar un "diálogo directo". El Polisario quita importancia a este matiz y señala que el propio Marruecos reconoce por primera vez en un foro internacional la necesidad de establecer contactos con los independentistas saharauis.Es cierto que por primera vez en la historia de la disputa sobre el Sáhara occidental entre Marruecos y los independentistas el representante del reino jerifiano en la ONU no votó en contra de una resolución apadrinada por Argelia y se sumó al consenso general. En Nueva York no hubo ni siquiera necesidad de votar. Como todos los países representados en la Cuarta Comisión, Marruecos incluido, estaban previamente de acuerdo con el texto presentado por Argelia y otros 40 Estados, la resolución fue aceptada por unanimidad y sin recurrir a las urnas.

El cambio en la posición de la diplomacia marroquí, deseosa de evitar otra nueva prueba de fuerza y otra nueva derrota en un foro internacional, ha sido el fruto de una larga negociación con Argelia. Entre la sesión del pasado año en la Cuarta Comisión de la ONU, en la que Argelia presentó una resolución favorable a ,negociaciones directas", y la presente ha mediado un año fructuoso para la reconciliación entre Rabat y Argel, socios ahora en el proyecto de la unión del Magreb árabe.

El Sáhara occidental, no obstante, sigue siendo un grave obstáculo para una total buena vecindad entre los dos países más importantes del noroeste de África. Los recientes ataques del Polisario contra los muros de defensa marroquíes y la presentación inicial por Argelia en la Cuarta Comisión de un proyecto de resolución semejante al de años anteriores habían despertado recelos marroquíes hacia la actitud de los argelinos.

Emisario personal

En vísperas de la votación en Nueva York, Hassan II envió a Argel a su consejero personal Reda Guedira con un mensaje para el presidente Chadli Benyedid, artífice argelino del acercamiento a Marruecos y amigo de Hassan II. A raíz de esta visita, Marruecos y Argelia decidieron no enfrentarse de nuevo en la ONU. El proyecto argelino cambió negociaciones por diálogo.Es también, pues, la primera vez que Marruecos acepta oficialmente que tiene que "dialogar" con el Polisario. En Rabat se afirma ahora que ese cambio de posición no es tan importante, puesto que el propio Hassan II rompió el pasado enero el tabú de verse cara a cara, en Marraquech, con dirigentes del Polisario, en lo que se presentó oficialmente como "una audiencia" del soberano.

Desde Argel, los portavoces del Polisario no dan mayor trascendencia al cambio de negociación por diálogo y se felicitan por el hecho de que la resolución apoye la misión de buenos oficios de la ONU, tendente a facilitar los contactos entre las partes; que permitan proclamar una tregua en el conflicto y celebrar un referéndum de autodeterminación. El Polisario reitera su demanda de una "retirada sustancial" del Ejército y la Administración marroquíes del territorio en litigio en las vísperas de la consulta.

El Polisario pide ahora a Europa occidental que salga de su "pasividad" y ejerza sobre Marruecos presiones "reales y efectivas" para obligarle a aplicar la resolución de la ONU.