El Supremo da la razón a Defensa frente a los pilotos que desean la baja

El Tribunal Supremo considera que Defensa actúa legalmente al no conceder la baja a los pilotos del Ejército del Aire que la han solicitado en los últimos meses, según una sentencia que revoca otra de la Audiencia Nacional emitida el pasado verano.Según fuentes jurídicas, el Supremo ha aceptado así el criterio expresado en el correspondiente recurso por el abogado del Estado, a la vez que ha desestimado un recurso planteado por uno de los pilotos afectados.

Laureano García, portavoz de Defensa, señaló respecto a la decisión del Supremo: "Lógicamente, ha producido satisfación, pues confirma y ratifica los criterios mantenidos por el ministerio, en el sentido de anteponer el interés de la Defensa Nacional al interés particular".

Atender peticiones

No obstante, el ministerio reitera "su firme voluntad de atender las peticiones de los pilotos y proceder a la concesión de las bajas solicitadas a medida que vayan produciéndose nuevas incorporaciones de pilotos a la Fuerza Aérea", como ya se hizo el pasado mes de agosto cuando, al incorporarse los tenientes de la última promoción de la Academia General del Aire, se concedió la baja a los cuarenta primeros pilotos que la habían solicitado.Otras fuentes de Defensa agregaron: "Formar un piloto cuesta muchos millones y es lógico y ajustado a Derecho, como se desprende de la sentencia del Supremo, que la Administración trate de obtener el máximo rendimiento a esta inversión. De ahí que la Ley del Régimen del Militar Profesional que entrará en vigor el próximo primero de enero prevea un tiempo mínimo de prestación de servicios al Estado de estos profesionales".

Un centenar de pilotos militares están a la espera de que se den las circunstancias legales adecuadas para abandonar las -Fuerzas Aéreas. El malestar originado-por este hecho ha creado en los últimos meses fuertes tensiones internas entre los más altos mandos militares y los pilotos, muchos de los cuales ya tienen aprobados exámenes de ingreso en compañías aéreas privadas.