La URSS permite que la Cruz Roja intervenga en sus asuntos políticos
La Unión Soviética ha comunicado oficialmente al Gobierno suizo su decisión de suscribir los protocolos adicionales de los convenios de Ginebra, que implican la posibilidad de que miembros del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), organismo neutral de derecho privado suizo que protege a los presos y víctimas de la violencia, puedan intervenir en los conflictos internos que se susciten en el territorio soviético.La decisión, adoptada oficialmente por el Soviet Supremo el pasado 4 de agosto, ha sido considerada en los foros internacionales de una gran trascendencia política porque refuerza la apertura al exterior iniciada con laperestroika y porque deja en una posición incómoda a países como Estados Unidos, Reino Unido, República Federal de Alemania, Israel y otros muchos del Tercer Mundo que no han suscrito eStos protocolos adicionales alegando que sería tanto como reconocer una legitimidad al terrorismo, a las guerrillas de los movimientos de liberación o a la intifada de los palestinos en los territorios ocupados por Israel.
Los países firmantes de los convenios de Ginebra aceptan la medíación y la intervención del CICR en los conflictos bélicos internacionales, es decir, entre países. Estos convenios están suscritos prácticamente por todos los países del mundo.
Los dos protocolos adicionales, en cambio, comportan que el CICR pueda proteger, como organismo neutral, los derechos humanos de las víctimas y presos de los conflictos internos, ya sean guerras civi.les o disturbios políticos.
Los firmantes se compronieten a no atacar a la población civil y a no utilizar determinados procedimientos de guerra, por ejemplo, armas químicas. Estos protocolos sólo han sido suscritos por 76 países, entre ellos España.
Intervención en Georgia
Antes incluso de su adhesión formal a los protocolos de Ginebra, la Unión Soviética sol¡citó a intervención del CICR tras los conflictos ocurridos en la República de Georgia, después de que se acusara a las autoridades locales de utilizar gases contra los manifestantes. Una delegación del CICR que incluía médicos visitó varios hospitales de Georgia y elevó un informe a las autoridades soviéticas sobre el trato que debían recibir los enfermos.
La decisión de la Unión Soviétíca es considerada de gran trascendencia, dada su influcincia sobre muchos otros países y la dinámica política desencadenada en el último año en los países comunistas. Hungría fbe el primer país del Pacto de Varsovia que suscribió los protocolos de Ginebra. Poco después lo ha hecho la Unión Soviética, y casi al mismo tiempo, Bulgaria.
