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HUIDA A OCCIDENTE

Relevo en la CDU

"Este es mi partido, y no lo digo en sentido posesivo", dijo ayer el canciller federal y presidente de la Unión Cristiano Demócrata (CDU), Helmut Kohl, al dirigirse a los delegados del 37' congreso del partido en Bremen. La aclaración era necesaria, pues la maniobra del coriaceo político conservador alemán de no presentar a Heiner Geissler como candidato a la reelección en la secretaría general y sustituirlo por uno de sus fieles, Wolker Ruhe, le salió redonda, pese a los numerosos augurios de que su inesperada decisión, tomada el mismo día que volvió de vacaciones, se iba a volver contra él mismo en el congreso del partido.Kohl no podía soportar la sombra de Geissler, un político con gran carisma y una considerable dosis de populismo que algunos calificaban sin ambages de demagógico. El propio Geissler lo reconoció ayer en su discurso al admitir que el canciller quería "un secretario y no un general para dirigir el aparato del partido". Kohl quiere tener el partido en sus manos y Geissler, durante 12 años, intentó lo contrario: separar la organización del Gobierno, mantener al partido al margen de las veleidades de la Cancillería.

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Pero no ha podido con Kohl y en su puesto está ahora un hombre joven, desconocido en el aparado de la CDU y que se lo debe todo al canciller. Geissler dejó su puesto sin aspavientos y con un sólo gesto de protesta: "Los fallos son de todos", dijo, refiriéndose a los que le acusan de ser el responsable del lento declive electoral de la CDU.

Se esperaba, de todos modos, una reacción por parte de quienes acusan a Kohl de tomar decisiones sin consultar a nadie. Había que poner a votación el puesto de Kohl en la presidencia, el del nuevo secretario general y el de los siete vicepresidentes, entre cuyos candidatos figuraba Geissler. En cualquiera de estas votaciones podía producirse un voto de castigo contra el canciller.

Nada de este sucedió. La presidencia se saldó con 571 papeletas en favor de Kohl, casi un 80%. El joven Ruhe fue prácticamente aclamado al obtener 628 votos, más incluso que Kohl. Quedaba la esperanza de que Geissler fuera compensado con un buen resultado. Tampoco. Entró el quinto entre los siete notables del partido con tan sólo 480 votos.

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