EI 'bunker' antimafia de Palermo, un nido de micrófonos y teléfonos 'pinchados'

El Ministerio del Interior italiano ha confirmado que el teléfono del juez antimafia Giovanni Falcone presenta "anomalías, inquietantes", mientras se ha podido saber que toda la centralita del bunker judicial de la comisión antimafia de Palermo era un colador en el que podían entrar cuantos querían en sus 80 líneas, que debían estar superprotegidas.

Se ha hallado hasta un magnetófono instalado en la línea directa de Falcone, mientras los italianos se preguntan quién espiaba al mítico juez condenado a muerte por la Piovra: la Mafia o los servicios secretos por orden de algún grupo político.

La atmósfera en el llamado palacio de los venenos, es decir el palacio de justicia de Palermo, se hace cada día más irrespirable. La Mafia envió en la noche del sábado un mensaje muy concreto, mediante el asesinato del policía Antonio Agostini, de 26 años, y de su esposa, Giovanna, de 20, recién casados y que esperaban un hijo.

El joven policía trabajaba en el barrio de San Lorenzo, controlado por el clan Corleone, ganador de las luchas intestinas de la Mafia. Es el mismo barrio en el que el 7 de octubre de 1987 fue asesinado el muchacho de 11 años, Claudio Domino, por el único crimen de que quizás "había visto algo que no debía ver". Y el nuevo delito de sangre ocurrió en vísperas del aniversario del asesinato, el 6 de agosto de 1985, del jefe de la policía Ninni Cassara y de! agente Roberto Antiochia. En la liturgia de la Mafia, los aniversarios son algo muy importante. Ha sido algo así como decir: "Aquí estamos, y seguimos matando 11.

Anomalías electorales

Pero si Palermo arde, en Nápoles el clima no es menos denso, tras el descubrimiento de que en las últimas elecciones políticas, en 1987, se registraron importantes anomalías, probablemente con la ayuda de la Camorra, la mafia napolitana. Incluso el diario Corriere della Sera ha sugerido que el hecho podría obligar a convocar nuevas elecciones. Hasta ahora se sabe que 150 de los 630 miembros del actual Parlamento resultan, a dos años de legislatura, sin una auténtica convalidación, con el agravante de que en esta zona, Nápoles-Caserta, resultaron elegidos personajes de primera plana, como el democristiano Antonio Gava, actual ministro del Interior; el secretarío socialista, Bettino Craxi; y el comunista Giorgio Napolitano. No es que las anomalías hayan afectado también a ellos, pero resultaron elegidos en unas circunstancias que se consideran, en general, Ilegítimas. Entre las irregularidades reconocidas se cuenta la desaparición de miles de papeletas electorales antes de que fueran controladas o la sospechosa inexistencia de papeletas en blanco, cuando los votos en blanco alcanzaron el 10% en las demás zonas del país. También, en algunos lugares se habían lanzado las papeletas de votos al aire, mezclándolas con las de otros colegios, de forma que se ha imposibilitado adrede el trabajo de control.