El Gobierno catalán proyecta un plan de inversiones 650.000 millones para los próximos cuatro años

La Generalitat de Cataluña ha elaborado un plan de inversiones para los próximos cuatro años que asciende a más de 650.000 millones de pesetas. De esta cantidad, casi el 50% corresponde al Departamento de Política Territorial y Obras Públicas. Dentro del programa de inversiones del próximo año, las diferentes áreas de la Administración autónoma han presentado al Departamento de Economía y Finanzas, que dirige el conseller Ramón Trias Fargas, propuestas que suman algo menos de 170.000 millones.

De ser aprobado por el Consell Executiu el Plan de Inversiones Públicas 1990-1993 (PIP) tal como ha sido elaborado, supondría un incremento de las inversiones para el próximo año del 32,34% respecto a 1989. A partir de 1991, la Generalitat prevé una cierta contención del gasto público e, incluso, una ligera tendencia a la baja.Las propuestas presentadas al PIP, a las que ha tenido acceso EL PAÍS, reflejan en primer lugar que la Administración autonómica ha optado por un fuerte incremento de la inversión para el próximo ejercicio. En 1990, las obligaciones reconocidas para inversiones por la Generalitat y sus organismos autónomos suman un total de 168.878 millones de pesetas, lo que supone un incremento de más de 41.000 millones respecto al presente ejercicio.

Comparativamente, es sin duda el incremento anual más importante de los registrados en los casi 10 años de mandato de Jordi Pujol y de la coalición nacionalista Convergéncia i Unió que ha visto con inquietud en los dos últimos comicios -autonómicas de 1988 y europeas de 1989- como se estabilizaba su base electoral. CiU perdió tres diputados en las elecciones al Parlamento catalán y un eurodiputado en los comicios a la Cámara de Estrasburgo.

Los incrementos en las inversiones son tanto más significativos si se tiene en cuenta que Economía y Finanzas, al sentar las bases del PIP, ya dejó un amplio margen a los departamentos de la Generalitat, de forma que sus propuestas de inversiones llegarán hasta el 25% del importe anual de las obligaciones de capital consolidadas incluidas en los Presupuestos de la Generalitat para 1989. [El crecimiento medio anual del capítulo de inversiones reales del Estado para el período 19891992 es de un 16,7%].

El PIP no se ajusta en su distribución al análisis de los resultados electorales que efectuó a principios de julio el Consell Nacional de Convergéncia Democrática (CDC) y parece responder más a la influencia que tienen determinados consellers del área económica -sobre todo el responsable de Industria, Maciá Alavedra, que actúa como un superconseller- ante Jordi Pujol. En CDC se atribuyó la pérdida del escaño en Estrasburgo a causas muy concretas: descontento del mundo rural, malestar de los sectores del pequeño comercio y la hostelería y cierta sensación de abandono en las comarcas más alejadas del área metropolitana.

Sin embargo, los departamentos que porcentualmente prevén incrementar más su inversión son Economía y Finanzas, Cultura, Presidencia, Industria y Energía, Enseñanza y Justicia. El caso de Economía es poco significativo ya que más del 60% de la inversión (2.352 millones) se destina a pagar a La Caixa los locales de la Via Laietana adquiridos para ubicar el Mercado de Futuros. En cambio los Departamentos de Presidencia, Cultura e Industria justifican el incremento de sus inversiones en proyectos relacionados con 1992.

Presidencia, departamento que coordina el hombre de confianza de Jordi Pujol, Lluís Prenafeta, tendrá asignada una transferencia a la Corporación Catalana de Radio y Televisión (principalmente TV-3 y Canal 33) por un total de 11.897 millons de pesetas en los próximos cuatro años, de los que 2.335 millones se invertirán en 1990.