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500 oficiales y suboficiales deberán dejar los ejércitos en los próximos años

Miguel González

Alrededor de 500 oficiales y suboficiales de complemento deberán abandonar los ejércitos en los próximos años como consecuencia de la entrada en vigor de la ley Reguladora del Régimen del Personal Militar Profesional, que la semana próxima será definitivamente ratificada por el Congreso. En virtud de la misma ley, los restantes 2.300 oficiales y suboficiales de complemento con que cuentan los tres ejércitos se convertirán en profesionales a todos los efectos, ya que llevan más de seis años de servicios efectivos.

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La disposición adicional décima de la Ley del Personal Militar, antes llamada ley de la Función Militar, establece que los militares de complemento y de Reserva Naval que, el 1 de enero de 1990, lleven más de seis años en activo se integrarán en las correspondientes escalas de los cuerpos respectivos, por lo que se convertirán en militares profesionales a todos los efectos.En cambio, quienes no lleguen a seis años de servicios efectivos cumplirán su contrato y al término del mismo, sin posibilidad de prórroga, deberán abandonar las Fuerzas Armadas. Como alternativa, se les ofrece la posibilidad de acogerse a la normativa que regula a los militares de empleo, quienes tienen limitada su permanencia en los ejércitos a un máximo de ocho años, por lo que a medio plazo también se verán obligados a dejar la milicia.

De los aproximadamente 2.800 oficiales y suboficiales de complemento con que cuentan las Fuerzas Armadas, en torno a 2.300 cumplen el requisito impuesto por la Ley del Personal Militar para convertirse en profesionales, mientras que los 500 restantes no llegan al mínimo de tiempo exigido, según los datos que maneja el Ministerio de Defensa.

En su redacción inicial, el proyecto de ley fijaba en nueve años el tiempo de servicio que debían tener los militares de complemento para continuar en el Ejército, lo que hubiera supuesto el despido de más de un millar de oficiales y suboficiales. A lo largo del trámite parlamentario se enmendó esta disposición, rebajando en tres años el tiempo exigido a los militares de complemento, con lo que el problema ha sido paliado pero no eliminado.

Los oficiales y suboficiales de complemento cuentan actualmente con contratos de carácter anual que se renuevan de manera prácticamente automática e indefinida, de modo que muchos de ellos continúan en la milicia hasta el retiro. Hace algunos años, sin embargo, se decidió no incorporar a nuevos militares de complemento, al márgen de los ya existentes, salvo para puestos muy especializados.

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La integración en la escala superior (de teniente a teniente general) de algunos oficiales de complemento pertenecientes a los cuerpos de Intendencia e Ingenieros y a los cuerpos comunes de las Fuerzas Armadas ha provocado malestar en los oficiales de las escalas especiales, a los que la ley del Personal Militar incluye en la escala media (de teniente a teniente coronel). Según fuentes de Defensa, la existencia de agravios comparativos es un efecto inevitable del nuevo sistema, que se caracteriza por su voluntad de racionalizar y simplificar situaciones diversas.

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Sobre la firma

Miguel González
Responsable de la información sobre diplomacia y política de defensa, Casa del Rey y Vox en EL PAÍS. Licenciado en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) en 1982. Trabajó también en El Noticiero Universal, La Vanguardia y El Periódico de Cataluña. Experto en aprender.

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