Mitsotakis busca siete diputados para formar Gobierno
El conservador griego Constantino Mitsotakis, que resultó ganador el pasado domingo en las elecciones legislativas con un 44,3% de los votos frente al actual primer ministro, el socialista Andreas Papandreu, fue encargado ayer por el presidente de la República, Christos Sartzetakis, de que inicie las conversaciones exploratorias para formar Gobierno. Conforme a la Constitución, Mitsotakis tiene tres días para formar Gobierno, lo que le va a resultar difícil al carecer de la mayoría absoluta de la Cámara -le faltan siete diputados-, que le permitiría la formación de un Gobierno estable.
Con 144 diputados de un total de 300, el dirigente conservador griego puede contar con la única diputada del partido Diana (Renovación Democrática-Derecha Liberal), pero su adhesión resulta de todo punto insuficiente. Mitsotakis invitó el pasado lunes a la Coalición de Izquierda y del Progreso (que agrupa a los comunistas y diversos partidos izquierdistas), así como a los socialistas "honestos" a apoyarle.El jefe del nuevo partido más votado en Grecia (Nueva Democracia) quiere formar un Gobierno provisional para garantizar la catharsis (purificación de la vida política) y para castigar a los culpables en el escándalo financiero del banquero Koskotas, quien está encarcelado en EE UU. Una vez llevada a cabo tal misión, Mitsotakis desea convocar a los griegos a las urnas para conseguir una mayoría estable. La Coalición ha rechazado tajantemente la invitación del político conservador.
"Ni un día más"
Después de su entrevista con el presidente Sartzetakis el dirigente conservador insistió ante los periodistas que los socialistas del PASOK (partido socialista griego) no pueden permanecer en el poder "ni un día más".
Mitsotakis ha pedido al presidente que el Gobierno en funciones de Papandreu se ocupe tan sólo de cuestiones "nacionales", como el asunto chipriota, que según el conservador pasa por un momento crítico y la cuestión de la Tracia occidental, región nororiental de Grecia donde vive una impor tante minoría turca y que eligió el pasado domingo a un diputado de esa minoría.
El presidente de Nueva Democracia informó que está de acuerdo en que sea el jefe del Estado Sartzetakis el que represente a su país los próximos días 26 y 27 en la cumbre semestral de la Comunidad Europea en Madrid, acompañado por un representante de cada uno de los tres grandes partidos griegos. En el terreno de la política interna, Mitsotakis exigió al presidente el despido inmediato de los gobernadores socialistas y el cambio de los directores de organismos públicos, directores de las cadenas de radio y televisión nacionales, así como del jefe del servicio secreto griego.
El viernes o el sábado próximos será Papandreu el encargado de las conversaciones exploratorias si Mitsotakis fracasa, como es lo más probable. El primer ministro, cuyo partido obtuvo 125 escaños el pasado domingo, reafirmó ayer que los griegos habían votado a una "mayoría democrática y progresista" cuyo deber es "gobernar".
Los griegos "han rechazado la vuelta de la derecha al poder añadió Papandreu, que acusó a los conservadores de utilizar "de manera hipócrita la catharsis para robar votos a las fuerzas progresistas y democráticas" en el Parlamento.
"Hemos sido los socialistas quienes empezamos la catharsis y la llevaremos a su fin en el Parlamento con la ayuda de otras fuerzas progresistas y democráticas", aseguró el primer ministro.
"Estamos en un momento decisivo para el futuro de estas fuerzas y del país, y," concluyó, "no habrá rechazo a este desafío histórico".
Como ocurriera con los conservadores, la Coalición de Izquierda ha rehusado dar su apoyo a los socialistas. El secretario general del partido comunista y presidente de la Coalición, Harilaos Florakis, será el último al que convocará Sartzetakis si fracasan las conversaciones exploratorias de Mitsotakis y Papandreu. La Coalición renovó su propuesta para formar Gobierno a otras fuerzas para conseguir un gabinete "de confianza, que represente ampliamente a las fuerzas del progreso y democráticas" con el fin de "aplicar una política de purificación, transparencia, democracia y defensa de los derechos de los trabajadores".
Si ninguna de las conversaciones exploratorias consigue su objetivo, Grecia se encaminará a nuevas elecciones.
