El ministro Barrionuevo no acepta mediar en el convenio de Renfe

El ministro de Transportes, José Barrionuevo, ha rehusado mediar en el convenio de Renfe, tal como le solicitaron la semana pasada CC OO y UGT, aunque sí está dispuesto a hablar sobre el futuro de ferrocarril cuando se logre un preacuerdo en la negociación colectiva. Los trabajadores ferroviarios iniciaron ayer un nuevo proceso de conflictos que culminarán en huelgas de 24 horas los días 30 de junio y 1 y 3 de julio.

Las nuevas huelgas coinciden con la resolución de la Audiencia Provincial de Madrid, conocida a yer, por la que se admite a trámite la querella interpuesta por CC OO y UGT contra Julián García Valverde, presidente de Renfe, y Damián Navascués, director general, por encontrar indicios de que sus declaraciones sobre la posible legalidad de las huelgas realizadas en junio de 1988 pudieran constituir un delito social contemplado en el artículo 177 bis del Código Penal. Para el comité esa resolución confirma que la dirección de Renfe "coharta el libre ejercicio el derecho de huelga".En los paros parciales de ayer, los trabajadores cumplieron los servicios mínimos decretados por Transportes y que afectaban a cercanías. Los trenes de largo recorrido sufrieron retrasos superiores a una hora. Los únicos incidentes se registraron en las estaciones de San Andrés (Barcelona) y Entrevías (Madrid), donde grupos de trabajadores detuvieron el paso de trenes.

Los paros de 60 minutos en cada turno proseguirán hasta el día 29 y serán de 24 horas el 30 de junio y el 1 y 3 de julio. En relación a los de ayer, la dirección y el comité coinciden en que se desarrollaron con más normalidad que las huelgas anteriores. Las protestas tuvieron lugar de 3 a 4, de 7 a 8 y entre las 19 y las 20 horas, períodos en los que los servicios de cercanías funcionaron al 75% en las grandes capitales y al 50% en las restantes.

La participación en los paros según la dirección de Renfe osciló entre el 15% y el 17% de la plantilla en los distintos turnos, mientras que los sindicatos aseguran que la respuesta de los trabajadores fue del 90%.

Cantidad a cuenta

Ante la falta de convenio, la dirección de Renfe va a entregar como cantidad a cuenta un 5% de aumento salarial a los trabajadores, salvo a los que lo rechacen expresamente. El portavoz del comité y miembro de CC OO, Mariano Santiso, asegura que con ello no se resuelve el problema, porque la discrepancia de fondo no es económica. "Al trabajador de a pie", afirma, "no le preocupa un punto más o menos de salario, lo que quiere es clarificar el futuro de la empresa".Ante el bloqueo de las negociaciones del convenio y para acabar con el conflicto que se prolonga desde marzo, CC OO y UGT pidieron la mediación del responsable de Transportes y Comunicaciones, José Barrionuevo. Ayer el ministro les comunicó que está abierto al diálogo ,después de que se logre un acuerdo en el convenio, argumenta que su intervención en estos momentos supondría una interferencia entre las partes, aunque sí se muestra dispuesto a hablar en su día con los sindicatos sobre el futuro del ferrocarril.