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La masa salarial para los ejércitos aumenta un 15,8% con respecto al incremento fijado en enero

Carlos Yárnoz

El reciente decreto sobre retribuciones militares supone que la masa salarial de los ejércitos crezca en un 15,8% con respecto a la fijada el pasado enero, mes en que los sueldos militares ya subieron como los del resto de los funcionarios. Según documentos oficiales conocidos por este periódico y que Defensa se niega a facilitar, esa masa salarial ha pasado de 228.501 millones de pesetas anuales a 264.630 millones. La mayor subida (33,1%) ha correspondido a los subtenientes, y la más baja (8,7%), a los tenientes. Los salarios de los tenientes no permanentes incluso han bajado en 28.818 pesetas al año, pero recibirán un complemento transitorio para que no pierdan dinero. Esta disparidad ha originado tensiones internas.

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Cambios de difícil digestión

Con las nuevas subidas aprobadas, los salarios de los militares experimentan este año el incremento más elevado, con diferencia, de todos los colectivos de la Administración, ya que el aumento medio para el resto de los funcionarios fue del 4%.Defensa trata de acomodar las retribuciones militares a las del resto de funcionarios -en los ejércitos eran menores desde 1984- e intenta preparar el desarrollo de la ley de la Función Militar, de cuyo contenido se desprende que la retribución de algún militar será superior a la de otro con mayor graduación.

De hecho, la subida salarial media ha sido ampliamente superada por los subtenientes, empleo más elevado de suboficial, cuya retribución mensual pasa de las 159.016 pesetas brutas en enero a las 211.632 ahora (un 33,1% más). En el lugar opuesto se sitúan los tenientes, colectivo que ha experimentado la menor subida, estimada en el 8,7% al pasar de las 188.379 pesetas mensuales a las 203.136.

Las subidas menores

Los tenientes no permanentes o con contratos temporales incluso pierden 28.818 pesetas al año con respecto a enero, si bien se prevén complementos transitorios para igualar esas pérdidas. En esta línea, el decreto señala que los militares de complemento, procedentes de las milicias universitarias, cobrarán sólo el 85%. de las retribuciones correspondientes a las de los profesionales. Así, los militares de complemento han recibido un jarro de agua fría tras su satisfacción por el hecho e que la citada ley de la Función Militar prevé integrarlos, automáticamente en las escalas medias de los ejércitos.Los escalones más altos de la carrera (generales y coroneles) y los más bajos (sargentos) han visto incrementados sus retribuciones ligeramente por encima de la media, mientras los escalones intermedios (teniente, capitán y comandante) experimentan aumentos inferiores a la media.

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Estos últimos escalones, sin embargo, serán seguramente los más beneficiados por otro tipo de complementos especiales no reflejados en los cuadros adjuntos a esta información: los complementos específico singular y del de dedicación especial. El primero se concederá por especial responsabilidad, preparación o peligrosidad. Pilotos, paracaidistas o marinos embarcados percibirán ese complemento que, según datos de que dispone este periódico, será fijado en 2,53 millones al año para un teniente general, 1,85 millones para un general de brigada, 943.152 para un teniente coronel, 649.320 para un capitán, 682.452 para un subteniente y 447.000 para un sargento.

El complemento de dedicación especial, para militares con destinos específicos, será de primer nivel (determinado por el 60% del complemento de destino) y de segundo nivel (el 30%. del mismo complemento).

A los sueldos reflejados en los cuadros adjuntos hay que sumar los trienios: 4.450 pesetas mensuales por cada trienio para oficiales, jefes y generales; 3.558 para alféreces y subtenientes; y 2.670 para brigadas y sargentos.

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Sobre la firma

Carlos Yárnoz
Llegó a EL PAÍS en 1983 y ha sido jefe de Política, subdirector, corresponsal en Bruselas y París y Defensor del lector entre 2019 y 2023. El periodismo y Europa son sus prioridades. Como es periodista, siempre ha defendido a los lectores.

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