Gutiérrez denuncia continuos intentos del PSOE para romper la unidad sindical

El secretario general de CC OO, Antonio Gutiérrez, denunció ayer continuos intentos del Gobierno y del partido socialista para romper la unidad de acción con UGT y aseguró que eso lo están detectando en cada iniciativa de los socialistas, como por ejemplo la propuesta de formar una comisión mixta PSOE-UGT o la concertación. En la mesa de empleo, según Gutiérrez, "planea esa amenaza", y como prueba presentó que el ministro de Trabajo haya alabado públicamente las propuestas de UGT cuando se trata de iniciativas conjuntas. Pese a ello, los dirigentes de Comisiones creen que la unidad de acción no corre ningún peligro mientras se mantenga la actual política económica y los intentos para desestabilizar los sindicatos, "aunque sólo sea por propia supervivencia", afirmó Gutiérrez, utilizando un argumento de Nicolás Redondo.

El secretario general de CC OO no renuncia a lograr la unidad orgánica y a que se forme una gran central sindical, "que no se llamaría CC OO ni UGT porque la absorción de un sindicato en otro no es posible". Gutiérrez entiende que eso es un objetivo lejano y añade que la experiencia le enseña que "no se pueden dar saltos en el vacío. Ha de ser una larga marcha". Comisiones ha comprobado en las elecciones sindicales celebradas en los dos últimos años que "la unidad fortalece al sindicalismo de clase" y en ningún caso quieren que se vuelva a "tiempos anteriores donde cada elección era una auténtica disputa".

Por ello, el máximo dirigente de CC OO, pese a reiteradas preguntas de los periodistas, no quiso contestar si es cierto que la unidad beneficia electoralmente a UGT, como han afirmado destacados dirigentes de la central ugetista. Gutiérrez asegura que ese tipo de apreciaciones, en su opinión "inconvenientes", en Comisiones no se van a hacer. Si reconoce que "cualquier sindicato que recupere autonomía, gana credibilidad".

Los datos facilitados ayer por Comisiones indican que en las elecciones de 1987 y 1988, esa central ha obtenido 4.544 delegados; UGT, 4.166; los no afiliados, 2.177, y otros sindicatos, 2.496. Gutiérrez subraya el cambio producido, ya que los no afiliados venían ocupando el primer lugar en períodos ajenos a los procesos oficiales de elecciones.

La campaña de afiliación iniciada por el sindicato ha logrado 61.681 nuevos militantes en 1988 y para 1989 esperan que esa cifra se duplique.