Los partidos vascos creen que ETA prorrogará la tregua hasta después de las elecciones europeas

Los líderes de los partidos vascos y el presidente de esa comunidad autónoma, José Antonio Ardanza, tienen el convencimiento de que la organización terrorista ETA prolongará su tregua, al menos, hasta las elecciones al Parlamento Europeo del próximo mes de junio. Ardanza consideró lógica" la ampliación de la tregua, así como el vicepresidente del Gobierno vasco, Ramón Jáuregui y otros líderes de partidos vascos, que insistieron en ser prudentes por si sucede algún hecho violento que provoque frustración. Ardanza afirmó que Herri Batasuna "está exigiendo dureza en Argel".

El lehendakari, José Antonio Ardanza, en un encuentro con periodistas en Bilbao en la noche del sábado, estimó "lógico" que la tregua anunciada por ETA hasta el próximo 26 de marzo se prorrogue al menos hasita después de las elecciones de junio al Parlamento Europeo. Esta impresión la puso de manifiesto igualmente el vicepresidente del Gobierno autórionio, Ramón Jáuregui, el pasado sábado, aunque con suma cautela por el temor de que pueda haber algún hecho violento. Representantes del Partido Socialista de Euskadi y del PNV creen muy probable que ETA no mencione fechas concretas, sino que simplemente anuncie una prórroga sin compromiso, "para no verse atada si en algún momento la quiere romper", según expresión de un nacionalista.Ardanza empleó el argumento de las elecciones al Parlamento Europeo como una de las posibles razones por las que la tregua se amplíe, toda vez que Herri Batasuna concurrirá a esos conúcios con el actual eurodiputado Txema !Montero a la cabeza. "Lo lógico es que haya prórroga después de¡ 26 de marzo y también para las europeas; ¡vaya campaña que iba a hacer en caso contrario Txema Montero!", exclamó el lehendakari.

Tanto Ardanza como el presidente del PNV, Xabier Arzalluz, han insistido en que Herri Batasuna no sabe muy bien lo que está pasando en las conversaciones de Argel entre el Gobierno y ETA. Arzalluz dijo exactamente: "Herri Batasuna ha demostrado hasta ahora que no tiene ni idea de lo que pasa en Argel". A este respecto, Ardanza manifestó: "Hay muy pocos en Herri Batasuna que estén enterados de lo que pasa en Argel, pero están pidiendo dureza a ETA para que mantenga alta la guardia". El presidente del Gobierno vasco considera que desde hace dos años las cosas están cambiando en ETA, "pero no tanto en Herri Batasuna".

Para Ardanza, "el ser revolucionario de despacho, de gabinete, es relativamente fácil, otra cosa es jugarse el tipo", en clara referencia a Herri Batasuna y ETA, respectivamente. "Quien está sentado en Argel tiene otros problemas, y quienes están en la cárcel, más problemas todavía". Para Ardanza, la banda terrorista "coge el testigo político" para negociar con el Gebierno central porque en Herri Batasuna "no tiene interlocutor".

No obstante, el presidente del PNV, Xabier Arzalluz, había manifestado horas antes que el Grobierno central no aceptó a Herri Batasuna en la mesa de negociación a pesar de la insistencia de esa fuerza política por estar presente en Argel. José Antonio Ardanza tiene conocimiento de que ETA "se sentó a negociar con el Gobierno central convencida de que podían hablar de autodeterminación y de Navarra".

"El Gobierno les dice que están equivocados" continúa, "en cuanto al interlocutor, porque el Ejecutivo tiene que respetar la Constitución, y para ese tipo de cuestiones están las instituciones vascas y el Parlamento Foral navarro". Según Ardanza, el Gobierno que preside Felipe González dejó claro a ETA que de Madrid "sólo dependían los indultos, y es de lo único que se podía hablar en Argel".

En un capítulo de claros mensajes. a la organización terrorista, José Antonio Ardanza pide a los etarras que "no pierdan su último tren", porque cuanto más tiempo transcurra antes de conseguir la normalización, "la generosidad será menor". Ardanza, al hablar de generosidad, se refiere a que "los vascos no tienen intención de pasar la factura a ETA". "Si esto se resuelve y vuelven a casa no vamos a pasarles factura. Es la misma generosidad que en 1975 nosotros tuvimos porque no se trataba de remover el 36 y los cuarenta años de dictadura, no se puede estar en el odio y en la venganza, sino pensar en el futuro".

El lehendakari considera que la manifestación del pasado sábado en Bilbao ha sido una "expansión" de reacciones similares producidas durante el pasado año en numerosos municipios vascos cada vez que ETA ha cometido un atentado.