La EFTA reafirma el compromiso de integración comercial con la CE

La cumbre de jefes de Gobierno de los países de la Asociación Europea de Libre Comercio (EFTA) aprobó ayer en Oslo una declaración en la que reafirma el compromiso de negociar con la CE la creación de un espacio económico europeo que en la práctica implique la libre circulación de mercancías, servicios, personas y capitales. Las opciones para establecer mecanismos de cooperación institucional y de toma de decisiones comunes siguen abiertas y comenzarán a concretarse a partir de la reunión ministerial de las dos organizaciones que se celebrará el próximo día 20 en Bruselas.

Los caminos para constituir una unión aduanera no deben poner en peligro la soberanía nacional, según precisó el canciller federal y presidente de la Confederación Helvética, Jean Pascal Delamurasse. Su país, dijo, asume la voluntad de estrechar la cooperación con la Comunidad Europea y está dispuesto a participar en una "unión aduanera no total, que no implique una EFTA de carácter supranacional". Delamurasse comentó al término de la reunión que los límites que Suiza impone particularmente son "un techo a la circulación de personas que no sobrepase el actual porcentaje del 16% de trabajadores inmigrantes y la garantía de no poner en peligro el derecho al autoabastecimiento agrario". Las dos condiciones tocan el nervio sensible de la filosofía de la CE.El acuerdo alcanzado ayer por la cumbre de la EFTA, la quinta en sus casi 30 años de historia, constituye "una señal política clara" para compartir un destino comercial común, declaró Gro Harlem Brundtland, primera ministra de Noruega y presidenta de la reunión. Por encima de "las cuestiones de supranacionalidad o de los mecanismos institucionales y de control de los acuerdos a establecer con la CE están los resultados que salgan de la negociación", añadió.

La Declaración de Oslo, firmada por los jefes de Gobierno de Austria, Finlandia, Islandia, Noruega, Suecia, Suiza y Liechtenstein, representa una toma de posición política que trasciende las actuales competencias de la Asociación Europea de Libre Comercio. Los 25 puntos del extenso comunicado no se refieren sólo a la creación del espacio económico europeo, sino que suscriben las iniciativas comunitarias en la apertura al Este, la contribución al crecimiento de la economía mundial, la ayuda a Yugoslavia y el apoyo a una solución al problema de la deuda del Tercer Mundo.

Como significó Ingvar Carlsson, primer ministro de Suecia, "ésta ha sido una reunión política, aunque la EFTA no tenga ese papel". Un miembro de su delegación fue aún más explícito cuando dijo que cada país es autónomo para "seguir el camino de integración emprendido o para quedarse fuera del proceso". La referencia no sólo sirve para Suiza, pero el primer ministro de Austria, Franz Vranitzky, recordó que su opción al ingreso de la CE es todavía "un largo camino" que exige una negociación previa y una aceptación posterior por referéndum.

Los mecanismos

Los cauces de cooperación con la CE para constituir un espacio económico europeo "homogéneo y dinámico", que aglutinaría el 45% del comercio mundial, siguen sin concretarse. La EFTA señala la necesidad de dotarse de mecanismos para negociar derechos y deberes equilibrados con la CE, pero aún no sabe de qué manera. Como muestra de su voluntad de ir más allá de la actual zona de libre cambio industrial está el acuerdo de liberalizar en el área de la EFTA los intercambios pesqueros a partir del 1 de julio de 1990.

A pesar de la indefinición impuesta por las trabas constitucionales de muchos de los países de la EFTA, "no vamos a Bruselas con las manos vacías", declaró la primera ministra noruega, quien destacó a la vez que "el estrechamiento de relaciones es una de las prioridades de la presidencia española de la CE".

Las propuestas para avanzar en la integración se refieren, entre otras, a una participación mayor en las políticas industrial y de investigación de la CE, la puesta en práctica de una acción común de protección del medio ambiente y las consultas en materia de política económica y monetaria.