La fiscalía acusa de un delito de incendio al encargado de un almacén textil de Sabadell

La fiscalía de Barcelona ha presentado una querella criminal contra lldefonso Freixa Trullás, encargado del almacén de la firma Dertex, SA, de Sabadell, por considerarle autor del incendio que destruyó la nave industrial el pasado 29 de diciembre. La fiscalía solicita la prisión incondicional para el acusado debido a la gravedad de los hechos. Esta es la primera acción judicial concreta en relación a la docena de incendios que sufrieron distintas empresas del sector textil catalán en los últimos días de 1988 y primeros de 1989.De acuerdo con la investigación policial que ha servido de base para la elaboración de la querella, existen indicios suficientes para identificar a Freixa como la persona que provocó el incendio del almacén en la noche del 29 de diciembre, poco después de que un camión cargara parte del género almacenado en la nave.

A esta conclusión se ha llegado después de tomar declaración a testigos del incendio, como los, otros dos trabajadores que participaron en la carga del camión, y al propio acusado. José María Mena, fiscal designado para la investigación de los siniestros, precisó ayer que no se sabe con certeza cuál fue el sistema empleado para iniciar el fuego, aunque tiene la seguridad de que se utilizó algún material inflamable.

Mena afirmó que no se tiene constancia, por ahora, del posible móvil para provocar el siniestro, ya que Dertex se encontraba en una situación financiera normal, según las investigaciones policiales. La relación del acusado con la firma se limitaba, formalmente, a su trabajo como encargado del almacén, aunque no se descarta la existencia de otro tipo de vínculo con la empresa.

El fiscal no quiso pronunciarse sobre un posible móvil económico dada la situación del almacén, en el centro de Sabadell, y, por tanto, susceptible de convertirse en solar urbanizable. La firma aseguró que en el siniestro perdió unos 30 millones de pesetas, pese a que el material destruido era de escaso valor.

La petición de prisión incondicional para el acusado se apoya en dos circunstancias del incendio que, en opinión del fiscal, agravan el tipo de delito. La primera de ellas es que se trata de un fuego provocado en un almacén de material altamente inflamable, y la segunda, es que el solar siniestrado se encuentra a ocho metros de distancia de un edificio de viviendas ocupado por una treintena de vecinos.

Debido a estas dos circunstancias la pena que puede recaer sobre el acusado, en caso de que el tribunal le procese y le condene, puede ser de entre 20 y 30 años de reclusión mayor. Es decir, a efectos penales, el incendio del citado almacén puede ser sancionado con penas similares a las correspondientes a un asesinato.