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Un avión voló de Madrid a Santo Domingo con una avería de estabilización

El avión de Iberia DC-10 que el 8 de febrero cubrió la ruta Madrid-Santo Domingo voló con irregularidades en el cable de compensación de un alerón, instrumento que permite la estabilización de la aeronave. Este sabotaje fue descubierto en el aeropuerto de la capital de la República Dominicana, y la compañía Iberia ordenó desde Madrid que se procediese al cambio de cable y que el antiguo fuera enviado a España para estudiarlo.

Las anomalías en la estabilización del DC-10, matrícula ECCSK, fueron advertidas por la tripulación en pleno vuelo, por lo que una vez aterrizó el avión en Santo Domingo se indicó a los técnicos de mantenimiento que prestan servicio en este aeropuerto que procediesen a una inspección de los diversos instrumentos que garantizan el correcto alabeo de una aeronave.El cable siniestrado tiene forma de letra ele y se extiende desde la cabina de pilotaje, pasando por encima del tren de aterrizaje, donde dobla en perpendicular, hasta el alerón externo de una de las alas del avión. Los técnicos de mantenimiento procedieron en un primer momento a examinar el cable desde el tren de aterrizaje y observaron que cedía al tirar de él. Por ello desmontaron el alerón afectado y se observó que el cable, de -un milímetro y medio de grosor, estaba roto.

Finalmente, los técnicos pusieron un nuevo cable y desde Madrid la compañía Iberia ordenó que no se tirara el viejo, sino que se enviara a España para su posterior examen. Ese cable ha sido estudiado por elInstituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA), dependiente del Ministerio de Defensa, que ha estimado que sufrió un corte de cizalladura.

Por otro lado, Antonio García Hernández, presidente de la Asociación Sindical Española de Técnicos de Mantenimiento (ASETMA), salió ayer, en conversación con este periódico, en defensa del colectivo que preside y que engloba a 1.800 técnicos que trabajan en Iberia, de los cuales el sindicato afirma que tiene afiliados unos 1.400. Antonio García, cuyo colectivo mantiene un conflicto laboral con la compañía, criticó "la habilidad de Iberia de presentarnos ante la opinión pública como los responsables del sabotaje".

"Rotura fortuita"

El presidente de ASETMA indicó que el DC-10 objeto de la controversia fue revisado el 2 de diciembre pasado en Italia y allí se colocó un nuevo cable de compensación del alerón. "La anomalía puede ser de origen por una rotura fortuita en el montaje", añadió Antonio García, quien negó cualquiera cusación de sabotaje por parte de ASETMA. El presidente del sindicato considera que ésta es la hipótesis más probable, ya que este tipo de cables suelen ser cambiados tras 20.000 hi: ras de vuelo, que en un DC- 10 coincide normalmente con tres años de funcionamientoAntonio García también mostró si is dudas sobre que el cable averiado y el que ha estudiado el INTA sean el mismo, ya que se pudo cambiar en Santo Demingo.

El presidente de ASETMA aseguró que su colectivo se preocupa más por la seguridad en la naN egación aérea que la propia ce mpañía Iberia, ya que considera que en ésta prima la rentabililad sobre la seguridad. La ASETMA ha elaborado un estudio en el que denuncian 22 irregularidades desde el pasado 23 de diciembre. Entre ellas aparece una de ese día sobre anomalías en los altímetros, "dando errores de 100 pies en altitudes entre cero y 500 pies, siendo la gama de mayor peligro".

El día 1 de enero se observó, según el estudio, en una inspección prevuelo que "no había señal acústica en el sistema de detección de incendio de motores y de la APU [Unidad de Poteicia Auxiliar]. Al día siguiente, otro avión de la misma compañía aérea salió a volar "con dos ruedas del tren principal [de aterrizaje] fuera de norma por baja presión".

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