Los sindicatos piden al Ejecutivo que revise la inflación prevista para este año ante el comportamiento de enero

Las dos centrales sindicales mayoritarias, UGT y CC OO, al igual que el CDS y el PCE, expresaron ayer la necesidad de que el Gobierno modifique el objetivo de inflación establecide, para este año a la luz del resultado obtenido en el primer mes de 1989. Para UGT "es absolutamente incompatible", con la previsión del 3%, ya que supone una tercera parte del mismo en un solo mes. Para la central socialista el IPC de enero pone de manifiesto lo "irreal" del objetivo de precios del Gobierno y "seria incomprerisible que despues de este resultado se mantuviera, de forma cicatera y numantina, un criterio de precios falto de crédito técnico y social, distorsionador de la negociación colectiva, que sólamente tiene sentido si lo que se pretende es perjudicar a los trabajadores y sectores más desafavorecidos de nuestra sociedad".Por su parte, CC OO señaló en un comunicado hecho público ayer que "en un mes en el que la negociación colectiva prácticamente no ha comenzado, y por tanto, no cabe imputar a la elevación de los salarios presión alguna sobre los costes, el incremento de precios en enero, solo puede explicarse en base a la fuerte capacidad de imposición de márgenes y precios de parte de la oferta productiva, y a la afloración de rentas especulativas que se acomodan fácilmente a la elevación de los precios".

UGT destacaba ayer que los grupos en los que se mantiene un nivel de precios mas elevado son los que están más influidos por presiones sobre los precios por parte de los márgenes de beneficios, "aprovechando situaciones de insuficiencia de oferta, oligopolistas y monopolistas". La central socialista instó al Gobierno a revisar su cuadro macroeconomico y todas las rentas fijadas en relación al objetivo de inflación para no perjudicar nuevamente a pensionistas, parados, trabajadores sujetos al salario mínimo interprofesional y sectores mas desfavorecidos de la sociedad, "cuyo ejemplo más palapable es lo acontecido en 1988".

El portavoz el CDS, Agustín Rodríguez Sahagún, solicitó la comparencia urgente del ministro de Economía, Carlos Solchaga, y pidió que el Gobierno "deje de sacralizar las previsiones y tenga más consideración con los grandes colectivos como los pensionistas, funcionarios y pasados".

José Antonio Segurado, declaró que mantener el 3% de objetivo "es ridículo y complica la negociación salarial".

El PCE, por su parte, señaló "que el IPC de enero supone un nuevo fracaso del Felipe González, incapaz de gobernar su propia política económica" y exige la revisión del objetivo de inflación y la garantía del mantenimiente de la capacidad adquisitiva para salarios y pensiones".

Para el Consejo Superior de Cámaras hay que combatir la inflación "profundizando en la desregulación y flexibilización de la economía real".