Si yo fuera italiano

Si yo fuera italiano sería un delincuente. Debería pagar una multa que no puedo pagar y probablemente sería condenado a pasar entre uno y cuatro años de mi única vida en una de sus prisiones. Soy peligroso, fumo canutos. Me estremece pensar que cuando me hago un porro tiemblan los pilares de la sociedad. Soy egoísta y merezco el castigo. Fumo simplemente por placer, sin reparar en el grave perjuicio que causo a cientos, miles, puede que millones de personas honradas.Hacéis bien los políticos en velar por nosotros. Vosotros sabéis mejor que nadie por qué estamos en este mundo. Sabéis quién nos puso aquí y qué espera de nosotros. Sois amigos de Dios, y Él os dice al oído lo que está bien y lo que está mal. Realmente somos muy afortunados de teneros sobre nosotros.

Pero no deberíais parar ahí vuestra magnífica labor. Hay otros muchos problemas que necesitan de vuestro firme y justo brazo. Hay cuchillos que matan. No importa que sirvan también para cortar el pan. Prohibidlos todos para que dejen de matar. Y

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no os olvidéis del SIDA, no espereis mas, ya tenéis la solución: prohibid todo contacto sexual y acabaréis con esta plaga. Castigad la lujuria. No permitáis que placeres tan efimeros perjudiquen a la sociedad. Y disfrutad vosotros, bienaventurados, que estáis en el poder y poseéis la sabiduría y la verdad de todas las cosas.- Madrid.