La oposicion utilizará el Parlamento para criticar que Pilar Miró siga en su cargo

La oposición utilizará la comisión parlamentaria de control de RTVE no para formular preguntas sobre la gestión de la directora general del Ente Público, Pilar Miró, sino para preguntarle por qué continúa en el cargo y, sobre todo, para reprochar al presidente del Gobierno, Felipe González, que mantenga esta situación. El PSOE decidió en reunión interna no formular preguntas cuando Miró comparezca la próxima semana.

Tan sólo Luis Ramallo, de AP, y Federico Ysart, del CDS, ejercerán su derecho al control para evitar que se olvide el caso Miró. A su juicio existe una tendencia impulsada desde el Gobierno para que "el asunto se olvide" lo que va en consonancia con la actitud de la directora general "presentando planes para el futuro".Según el Estatuto de RTVE, el titular de la dirección general del ente debe comparecer una vez al mes en la comisión de control del Congreso de RTVE para someterse a las preguntas de los grupos parlamentarios sobre todos los aspectos de su gestión.

La situación creada tras el reconocimiento de la directora general de que había cargado a los presupuestos del ente público gastos personales y su afirmación de que iba a dejar el cargo hace ya un mes y no lo hecho ha sumido en el más absoluto de los desconciertos a la oposición y al Grupo Socialista.

Unos y otros pensaron que al final de este mes, cuando de nuevo hubiera que convocar a la comisión de control, la directora general habría sido destituida por otra persona. La primera reacción de todos los grupos de oposición fue la de renunciar a formular preguntas, con lo que, ante la inexistencia de motivo de control, la directora general no tendría que asistir al Congreso, no sin antes proclamar que no reconocían a Pilar Miró como directora general.

Toda vez que el plazo de presentación de preguntas para esa comisión termina el próximo jueves, los grupos han meditado cuál será su actitud final. El portavoz en esta comisión de Minoría Catalana, Josep López de Lerma, manifestó a este periódico su escaso interés por preguntar nada a Pilar Miró: "No estamos motivados para hacer preguntas".

El diputado de Izquierda Unida-Esquerra Catalana Ramón Espasa fue el primero, ya en la anterior comparecencia, en afirmar que no tenía nada que preguntar a la actual directora general porque no la consideraba en activo, y exhortó en alto al presidente del Gobierno, Felipe González, para que liberara a Miró de esta carga."Hacer el juego"Tanto Alianza Popular como el CDS han considerado que no hacer preguntas o, lo que es lo mismo, no reunir a la comisión suponía "hacer el juego al Gobierno" para que este asunto quedara olvidado, por lo que no harán preguntas a la manera habitual, sino que las que formulen se centrarán en recordar a Miró sus palabras de que iba a dejar el cargo y sobre todo criticarán al presidente del Gobierno.

El diputado del CDS Federico Ysart considera que no es bueno "renunciar a la labor de control", por lo que utilizará esta facultad para "denunciar" al presidente del Gobierno por no haber nombrado a una nueva persona para la dirección del ente público. De otra parte, el aliancista Luis Ramallo dice estar dispuesto "a no hacer el juego al Gobierno", y aunque si toda la oposición en bloque decide abandonar la comisión de control su grupo se uniría en principio piensa utilizar ese foro para preguntar sobre, los destinatarios de los regalos de Pilar Miró y para pedirle "que se vaya a su casa".

"Es tremendo el ridículo que está haciendo el Grupo Socialista y a la tensión interna a la que les está conduciendo Felipe González", dijo Ramallo.

Los diputados socialistas de esta comisión se reunieron la pasada semana para dilucidar si hacían o no preguntas a Miró. Finalmente decidieron que no formularían preguntas. Según ha comentado un parlamentario del PSOE, "resulta ridículo en la actual situación hacer el paripé de preguntar qué películas va a poner en los próximos meses".