La Audiencia absuelve a Schuster y a Nuñez de la acusación de delito fiscal

La Audiencia de Barcelona ha absuelto al futbolista Bernd Schuster y al presidente M FC Barcelona, Josep Lluís Núñez, de la acusación de delito fiscal mantenida por el ministerio público y el abogado M Estado. El tribunal de la Sección Primera de lo Pena¡ ha considerado que el futbolista tiene una deuda con la Hacienda Pública, pero que ésta no llega a los cinco millones de pesetas, cantidad mínima fijada por el C6digo Pena] para sancionar un delito fiscal. Asimismo, los magistrados han rechazado la acusación que sostenía la abogacía de Estado contra Núñez al entender que el FC Barcelona abonó a Hacienda, aunque con retraso, las correspondientes retenciones en el contrato de imagen del jugador alemán

La sentencia, hecha pública ayer, rebate todos los argumentos que utilizaron el fiscal y el abogado del Estado el día del juicio para acusar a ambos procesados y, por el contrario, estima parte de las alegaciones de la defensa. El tribunal en la sentencia reconoce que Schuster ' actual miembro de la plantilla del Real Madrid, limitó su declaración de renta de 1985, cuando jugaba con el Barga, a lo percibido por el contrato profesional. Así, afirma que el futbolista ingresó a la Hacienda Pública una cuota de 3.052.731 pesetas, correspondiente a los ingresos del contrato profesional, que en 1985 ascendieron a 25.344.960 pesetas.El jugador alemán no declaró ningún ingreso más en 1985 y, por lo tanto, Hacienda no conoció que había cobrado otras 25.344.960 pesetas por el contrato de imagen o publicidad en el mismo año. El FC Barcelona tampoco hizo inmediatamente la correspondiente liquidación ni retención en este segundo contrato del jugador, aunque sí presentó una declaración complementaria, en marzo de 1987, en la que reflejaba que habían retenido un 5% de lo pagado por el contrato de imagen.

Posteriormente, en marzo de este año, cuando ya se había presentado la querella contra el jugador, el FC Barcelona presentó otra liquidación, también respecto a 1985 y a Schuster que reflejaba que, además del 5%, se retuvo un 32% del impuesto de la renta de lo percibido por el contrato de imagen.

El tribunal ha entendido que después de estos ingresos del FC Barcelona al fisco la ,cuota que tenía pendiente por abonar Schuster a la Hacienda Pública era de algo más de 3.000.000 de pesetas y no de 6.571.626 pesetas, cifra que mantenía el fiscal. En consecuencia, los magistrados han llegado a la conclusión que no hay delito, ya que la ley establece el mínimo de cinco millones de pesetas para acusar por delito fiscal. Con la sentencia absolutoria, el futbolista deberá pagar al fisco la cantidad adeudada en 1985, pero por vía adminsitrativa. Su defensor, Antonio Velasco, fijó la deuda en 3.411.000 pesetas.

En el caso de Núñez, el tribunal le ha absuelto de la acusación porque el club azulgrana ya fue sancionado administrativamente por la inspección de Hacienda cuando se descubrió que no había practicado las retenciones en el contrato de imagen del jugador.

La sentencia se acoge a un principio del derecho, denominado non bis in idem, por el que no se permite por unos mismos hechos multiplicar la sanción". Es decir, si el club pagó una multa al fisco, no puede ser sancionado por la vía penal. El tribunal descarta que el club tuviera la intención de eludir los pagos a la Hacienda Pública ya que para afrontarlos "se fijaron fondos de reserva, lo que evidencia buena fe (-)", dice el fallo. Por otra parte, el tribunal sostiene que aunque Núñez sea presidente de la entidad no es responsable directo de "la dirección económica".

Obligaciones fiscales

El tribunal entra también a comentar las obligaciones fiscales de los contratos de imagen suscritos por los futbolistas y el FC Barcelona. Así, subraya que "sobre este contrato han surgido a partir del año 1986 continuos conflictos entre el procesado -en referencia a Núñez- y el jugador".

El fallo hace mención a la polémica sobre las retencionesde Hacienda en este tipo de contratos afirmando que "ha existido mucha confusión sobre la tributación de los jugadores y deportistas profesionales, como se manifiesta en las distintas memorias anuales de la entidad deportiva -en referencia al Barga- en las que el club considera que hay hechos no sujetos a tributación, y al estimar los asesores fiscales que pueden existir diversas interpretaciones de la normativa".

Los magistrados hacen una crítica en la sentencia a lo que consideran una irregular actuación por parte de los órganos administrativos, ya que los inspectores de Hacienda y el abogado del Estado, cuya actuación obedece precisamente a los intereses de la Hacienda Pública, mantenían distintas cifras sobre lo que supuestamente había defraudado Schuster. Esta actuación, según el tribunal, "no ha sido coordenada y uniforme, no respetando las garantías que deben rodear la actuación de la Administración, para evitar la discrecionalidad y asegurar la igualdad de los ciudadanos ante la misma".

La fiscal del caso, Belén Suárez, no quiso precisar ayer si recurriría la sentencia al Tribunal Supremo, aunque fuentes judiciales señalaron que probablemente sí se interpondrá el recurso de casación. El abogado del Estado, José Manuel Silva, no pudo ser localizado por este diario y se desconoce si tiene intención de recurrir. Tanto Núñez, que tiene intención de acudir próximamente ante la comisión antiviolencia del Senado, como Schuster declinaron hacer declaraciones.