España y Francia inician una amplia ofensiva contra ETA

El Gobierno español ha diseñado y puesto en marcha, con la colaboración de Francia, una ofensiva a corto, medio y largo plazo para desmantelar a ETA Militar. Intensa búsqueda de activistas en ambos países, deportaciones, extradiciones, separación de presos, obstrucción de las vías de financiación y apoyo internacional a través del Grupo de Trevi marcarán la nueva etapa de la lucha contra, la organización terrorista, según han señalado a este periódico fuentes gubernamentales. El Ejecutivo francés se ha comprometido a localizar a la cúpula etarra y a retirar el estatuto de refugiado a los activistas de la organización, según las mencionadas fuentes.

La vía del diálogo podría reanudarse a largo plazo, aunque fuentes del Gobierno español se muestran muy pesimistas sobre la eficacia de la negociación con los terroristas que quieran dejar las armas.Los responsables del Ministerio del Interior elaboraron este verano, siguiendo las instrucciones del nuevo titular del departamento, José Luis Corcuera, -nombrado en julio-, una renovada estrategia de presión contra ETA para conseguir su defintivo acorralamiento.

Esta ofensiva va dirigida fundamentalmente a destruir el santuario francés donde la organización terrorista continua establecida. La obstrucción y definitivo cierre de sus vías de financiación es uno de los objetivos prioritarios del Gobierno y de ahí su firme oposición a que la familia del industrial Emiliano Revilla logre hacer llegar dinero a ETA.

Francia se ha comprometido a prestar la más estrecha colaboración antiterrorista, aunque fundamentalmente deberá ser España la que facilite la máxima información sobre los dirigentes y activistas. El ministro francés del Interior, Pierre Joxe, quien sólo ha discrepado en seguir utilizando de forma masiva las expulsiones por vía de urgencia, ha dado instrucciones personalmente a los mandos policiales de Bayona para que intensifiquen la búsqueda de miembros de ETA.

Disposición favorable

Asimismo, el Ejecutivo francés se ha mostrado dispuesto a reanudar la vía de las deportaciones y es favorable a extraditar a miembros de ETA. Muestra de esa disposición ha sido la reciente retirada del estatuto de refugiado a Santiago Arrospide Sarasola, Santi Potros, lo que supone la vía libre para su entrega a España. Significativamente, la Oficina Francesa de Refugiados y Apátridas (OFRA), dependiente del Ministerio de Asuntos Exteriortes, ha retirado el estatuto a Santi Potros "porque las circunstacias por las que se le concedió en 1982 ya no existen".Fuentes gubernamentales españolas aseguran que Francia está dispuesta, incluso, a retirar este estatuto a los otros 19 etarras que gozan del mismo, algunos de los cuales son importantes miembros de ETA y podrían ser reclamados por España.

Entre ellos se encuentra un histórico dirigente de la organización y veterano miembro de su comité ejecutivo: Eloy Uriarte Díaz de Guereño, señor Robles. En esta nueva ofensiva contra la organización terroris ta, la justicia francesa notificó ayer al presunto etarra Carmelo García Merchán la demanda de extradición que formularon contra él las autoridades espa ñolas el pasado mes de julio. Según la demanda, este activis ta participó en el asesinato de un. empleado de autopistas el 16 de marzo de 1978.

Policías españoles colaboran ya con los servicios de información en el sur de Francia con el fin de conseguir nuevos datos sobre el paradero de los dirigentes de ETA. Asimismo, como ya anunciaron los ministros del Interior francés y español en la reciente cumbre de León, los dos países realizarán intercambios de altos funcionarios y jefes policiales con el fin de lograr la mayor eficacia en la lucha contra el terrorismo.

Asimismo, está en marcha la creación de un grupo policial conjunto que controlará estrechamente el paso de la frontera española y tratará de ser un importante filtro para impedir el paso de los terroristas.

Expertos antiterroristas españoles estiman que para esta nueva ofensiva es necesario poner al día la información sobre los dirigentes etarras y su financiación para lo cual es importante la colaboración definitiva de los servicios de información franceses.