La Generalitat cerrará el Canal 33 hasta que el Gobierno le asigne una frecuencia

El Canal 33 suspenderá sus emisiones hasta que la Administración central conceda o indique a TV-3 que frecuencia debe utilizar para el nuevo canal autonómico, según el acuerdo alcanzado ayer en Madrid entre el ministro de Transportes, Turismo y Comunicaciones, José Barrionuevo, y el secretario general por delegación de Convergéncia Democritica (CDC), Miquel Roca. Aunque Barrionuevo, según fuentes de la Administración central, no adquirió ningún compromiso sobre la fecha en que se otorgará esta nueva frecuencia, todo parece indicar que los planes de la Generalitat de iniciar la programación regular del nuevo canal el 23 de abril no van a sufrir ningún retraso.

Fuentes de la Corporación Catalana de Radio y Televisión (CCRTV) señalaron ayer que desconocían el acuerdo y manifestaron que no estaba previsto, "al menos en un plazo de 24 horas", ordenar la suspensión de las emisiones del Canal 33.El acuerdo de ayer, "sujeto a concreciones posteriores", según fuentes de la Administración central, es el primer paso para resolver el conflicto institucional suscitado el pasado 11 de septiembre con la puesta en marcha, con carácter experimental, del Canal 33.

La Administración central replicó a lo que consideró una irregular ocupación de frecuencia ordenando a los responsables de la red de enlaces de Radio Televisión Española (RTVE) que interfirieran las emisiones. Paralelamente, fuentes de la Administración central aseguraron que ésta no sería receptiva a ninguna propuesta de acuerdo si continuaban las emisiones.

El acuerdo alcanzado ayer entre Roca y Barrionuevo prevé el cierre temporal de las emisiones experimentales del Canal 33 y obliga al Gobierno de Jordi Pujol a presentar una petición formal de frecuencia, exigencias ambas "que sitúan a la Generalitat en la vía de la legalidad", según las fuentes informantes. Por su parte, el ministro se comprometió a otorgar, aunque sea con carácter provisional, esa frecuencia, pero sin fijar ningún plazo de tiempo.La asignación de la nueva frecuencia no implicará, según lo pactado por Roca y Barrionuevo, el reconocimiento por la Administración central de que la Generalitat tenga competencias para poner en marcha un nuevo canal de televisión, ni que acepte o autorice su creación. De hecho, la nueva frecuencia será concedida a TV-3 y no al Canal 33, que, jurídicamente, será considerado por la Administración central como una ampliación de la actual televisión autonómica.

Paraguas jurídico

Los dos interlocutores también acordaron, siempre según las fuentes informantes, que la nueva frecuencia será utilizada por la Generalitat "como paraguas jurídico y técnico para canalizar las televisiones locales". Sin embargo, la forma en que se abordará la regulación de esas emisoras no se trató en la reunión de ayer, que se limitó a Roca y Barrionuevo, al no aceptar los representantes de la Administración participar en un encuentro al que asistiese el director general de la CCRTV, Joan Granados.

Jaume Sobrequés, secretario de Medios de Comunicación del Partit dels Socialistes (PSC) y presidente de la comisión de control parlamentario de la CCRTV, subrayó que el acuerdo implica "la aceptación de las tesis socialistas" sobre el papel que debe cumplir el nuevo canal en relación a las televisiones locales. En este sentido recordó que el programa electoral del PSC preveía "la ampliación de la programación de TV-3 con la creación de un nuevo canal, con el objetivo de impulsar y coordinar la programación de las televisiones locales".

Por su parte, el diputado del CDS en el Parlamento catalán, Xavier Latorre, aseguró ayer que, como sucede con TV-3, el Canal 33 será utilizado por el Gobierno de Jordi Pujol "para intoxicar a los catalanes con el mensaje convergente".