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Queridos aliados

Un portaviones de la VI Flota aporta 4.000 'turistas' más a Benidorm

Hasta los marineros de la VI Flota de EE UU son bien recibidos en Benidorm, donde jamás se rechaza a un turista aunque éste vaya armado hasta los dientes. El portaviones Forrestal y el destructor Dahlgren abandonan Benidorm hoy, domingo, después de haber dado descanso a sus más de 4.000 marineros durante una semana Sólo una minoría ha protestado por la presencia de los buques, pero no por la estancia de los militares. Que vengan los marineros, parece ser la, consigna, pero en autobús

Cinco marineros del portaviones Forrestal degustan pizzas en el local de José Avio. Los infantes de Marina desconocen que el propietario del local Maitai, donde almuerzan, se siente coaccionado con la presencia del portaviones Forrestal y del destructor Uss Dahlgren a una milla de la costa, entre la famosa isla de Benidorm y la playa de Poniente. Tampoco saben que se ha manifestado en más de una ocasión contra la presencia de la VI Flota desde que los norteamericanos eligieron Benidorm para el descanso de sus marineros, hace de eso siete años.Avío es une, de los 30 o 40 militantes de los verdes que hay en la ciudad, y asegura que levantarse de la toalla tendida al sol en la playa. y toparse con la visión del Forrestal es, "¡hombre!, como mínimo, coaccionador". Éste es un ecologista, pero de Benidorm. Lo cual significa que no puede sustraerse a la "solidaridad consumista" -en palabras de Roc Gregory, del departamento de turismo- que contagia a la ciudad. José Avío no se opone a la estancia de los marineros, que traen dólares frescos, sino que protesta por la presencia de los buques, "que contaminan estéticamente y también el agua y la arena". "Que dejen el portaviones en Cartagena o en Rota y que los traigan en autobús", concluye.

La presencia, esta semana, de más de 4.000 marineros ha llevado a los nacionalistas de la Unitat del Poble Valencià (UPV) a lanzar duras críticas contra el alcalde socialista, al que califican de "devoto de la presencia militar americana en nuestro pueblo". Tampoco a Jaume, el del bar Alone, le gustan los buques de guerra. "Con lo bonito que sería ver por aquí a barcos que organizan cruceros de lujo", dice.

El culto a la cerveza

Sin embargo, no es ésta la opinión mayoritaria en Benidorm, donde esta semana los marineros han reducido considerablemente las reservas de cerveza, siempre de la misma marca, con nombre de arcángel, eso sí. Los propietarios de hoteles, no ven con malos ojos a los soldados de la VI Flota, y en los clubes de alterne se sabe que algunos marineros llevan tres meses sin bajar a puertoDavid, un marinero con cerveza en mano,, confirma que Benidorm es el puerto del Mediterráneo preferido por él y sus compañeros. Esto y poco más ofrece como información. Su compañero ni siquiera se digna a dar su nombre de pila, y, para colmo, un tercero fotografía a los periodistas "como souvenir", aunque no especifica qué organismo archivará el recuerdo. El cuarto marine del grupo se marcha sin más.

Un diario de Alicante ha publicado que los marineros reciben instrucciones de sus superiores para no visitar determinados locales, por temor a las peleas o por miedo a contagios.

David lo niega y asegura que en sus días de descanso va donde le apetece.

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